SANTIAGO.- Unos 40 minutos duró la reconstitución de escena por la muerte del menor Óscar Landeros de 11 años, quien fue baleado por el ex cabo de la Subcomisaría Pudahuel Sur, José Miguel Canto Matus, el pasado 25 de agosto en la comuna de Maipú.
En esa oportunidad ex el carabinero le habría disparado al menor como reprimenda por haber golpeado en el ojo a uno de sus hijos mientras jugaban en la calle.
La pericia fue dirigida por la fiscal a cargo del caso, Mitzy Henríquez, y contó con la presencia de carabineros y peritos de la policía civil, entre ellos el patólogo forense de la Brigada de Homicidios Metropolitana, José Belletti.
Según la fiscal Henríquez, la idea del operativo es determinar la trayectoria del disparo y la concordancia entre el relato del imputado y los resultados que arrojan los informes científicos.
Canto Matus fue trasladado desde la Subcomisaría Pudahuel Norte, donde se encuentra en prisión preventiva hasta la calle Casas Viejas con Américo Vespucio, a un costado del Cementerio Parque del Sendero de Maipú.
A su llegada, el ex cabo estaba esposado y recibió los gritos de los familiares del menor fallecido que lo tildaban de asesino. Allí el ex carabinero dio su versión de cómo ocurrieron los hechos que terminaron con la muerte del niño y fue fotografiado por un perito de Investigaciones e interrogado por la fiscal Henríquez.
La representante del Ministerio Público sostuvo que se trata de una de las últimas diligencias del caso y que se pedirá la pena por homicidio calificado, la que parte de 10 años y un día.
Según la fiscal, el delito cometido por Canto Matus tiene la agravante de alevosía debido a que la víctima es un menor que no podía defenderse y el imputado tiene conocimiento en manejo de armas.