SANTIAGO.- Una vez finalizada oficialmente la XVII Cumbre Iberoamericana, la Presidenta Michelle Bachelet tuvo oportunidad para referirse el tenso intercambio de palabras que vivió el Presidente venezolano, Hugo Chávez, con el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero y el Rey Juan Carlos I.
Tras ser consultada insistentemente por la prensa sobre el incidente, el que incluso provocó el retiro del Rey Juan Carlos del plenario, la gobernante dijo que el enfrentamiento demuestra “en nuestra región hay diversidad, en como vemos las cosas, en los estilos en las que planteamos y las enfrentamos” e insistió en la certeza de que es indispensable la unidad política para tener una voz que sea escuchada.
A pesar del impasse, para Bachelet la cumbre fue sido "muy fructífera" y lamentó el revuelo que causó el conflicto entre Chávez y las autoridades españolas, ya que "si nos quedamos con eso de esta cumbre, estamos perdiendo también las perspectiva. Eso fue una discusión legítima entre países y cada líder tiene que hacerse cargo de lo que hace y lo que dice".
La Mandataria aclaró que para ella "son más importante los pasos concretos que vamos a hacer, porque eso tiene que ver la posibilidad, democráticamente, de decirse cosas abiertamente".
En esa línea, insistió en que el espíritu de la cumbre era la cooperación y destacó que "nosotros defendemos y respetamos que en entre jefes de Estado y jefes de Gobierno haya diversidad", la que llamó a respetar y manifestar con respeto, "al no interrumpir a los demás y de no descalificarse unos a otros, porque es sobre la basa del respeto es que podemos llegar a acuerdo".