En un distendido ambiente Gobierno, oficialismo y oposición se reunieron en el palacio de La Moneda para sellar el pacto educacional.
Presidencia.clSANTIAGO.- Con una audiencia que aplaudió de pie y la Presidenta Michelle Bachelet, sus ministros de Educación y de la Presidencia y los timoneles de la Concertación y la Alianza tomados de las manos en alto, se concretó a las 11.10 horas la firma del histórico acuerdo en materia educacional que derogará la Ley General de Educación y creará una superintendencia para velar por la calidad de la enseñanza.
El salón Montt-Varas repleto de invitados y estrechos colaboradores de la Mandataria -como su jefe de gabinete, Rodrigo Peñailillo y su directora de programación, María Angélica Álvarez, fue el escenario donde se logró lo que, a juicio de la gobernante "expresa claramente" el pacto social al que convocó en septiembre pasado.
En esa línea y en medio de un distendido ambiente en que todo momento se trató de dar señales de unidad, la Presidenta sostuvo que "lo que hemos visto hoy día es la capacidad de hacer un gran pacto social y político en torno a un tema que es básico para todos nosotros y que es entender cuan importante es la educación en la vida de un pueblo, en su desarrollo, en la capacidad de hacerse cargo de los desafíos que tenemos y sobre todo de hacer un país más justo, que dé más oportunidades a cada uno".
La Jefa de Estado resaltó que éste "es un gran día para Chile, ya que se firmó "un importante acuerdo político que creo que privilegia y reconoce con mucho orgullo lo que las fuerzas políticas de nuestro país somos capaces de hacer cuando ponemos por delante el interés nacional, cuando entendemos que aquí todos estamos trabajando para los chilenos".
Alcances del texto
Sin mencionar la palabra "lucro", Bachelet detalló que además de derogar la LOCE y crear una superintendencia que fiscalizará el uso de los recursos públicos destinados a la educación, el pacto contempla la creación de una nueva institucionalidad pública que implica el establecimiento de una Agencia de Aseguramiento de la Calidad Educativa.
También fija nuevas exigencias para los sostenedores de los establecimientos, quienes deberán ser personas jurídicas, poseer giro exclusivo en educación y destinar los recursos a todos los factores involucrados en el proceso educativo. Por lo mismo, estarán sujetos a un sistema de seguimiento y evaluación, de rendición de cuentas, auditoría y control.
Además establece la obligación de no seleccionar alumnos hasta 6º básico por razones de rendimiento escolar o condición socioeconómica. En cuarto lugar acuerda la generación de una nueva estructura curricular, que según Bachelet permitirá "avanzar gradualmente hacia la educación primaria de seis años, un primer ciclo secundario de cuatro años y un ciclo secundario final de dos años"·
Junto con agradecer la labor desempeñada por los parlamentarios de ambos sectores, la Presidenta destacó el aporte de los estudiantes secundarios que con su movimiento de mayo de 2006 dieron pie al surgimiento de un Consejo Asesor que, a su vez, permitió establecer un amplio diálogo para alcanzar acuerdos en pos de la enseñanza.
Asimismo, tras reconocer las diferencias que generaron las propuestas del Consejo Asesor -plasmadas en un proyecto de ley que envió al Parlamento y que en julio motivó la formación de una comisión político-técnica con representantes del gobierno y la oposición- Bachelet valoró los resultados obtenidos.
"Hemos discutido, hemos argumentado y hemos contra argumentado, pero lo más importante es que hemos defendido con pasión nuestras ideas, pero a la vez hemos sido generosos en aceptar los distintos puntos de vista y buscar el mejor acuerdo en materia educacional", afirmó.
Por lo mismo, dijo que espera que este tipo de consenso se traduzca en el futuro en nuevos pactos que aborden temas importantes para el país como la reforma al sistema electoral.