TEMUCO.- Tras una extensa negociación que contó con la mediación del obispo de Villarrica, Sixto Parzinger, un grupo de mapuches entregó el cuerpo de Matías Valentín Catrileo Quezada, de 22 años, quien esta mañana murió en un enfrentamiento con la policía en el sector de Vilcún, en la Novena Región.
El cuerpo del estudiante mapuche fue trasladado hasta el Servicio Médico Legal de Temuco para realizar las pericias respectivas, luego de ser entregado por el grupo de indígenas, con la presencia del obispo Pazinger, quien actuó como garante para velar por el proceder legal de los efectivos.
"Es una ayuda humanitaria y con mi sola presencia estaban tranquilos los mapuches, entregaron toda la información necesaria y tenían buena voluntad y después permitieron que la investigación haga su trabajo. Eran largas horas y entregaron el cuerpo y va todo el camino legal", señaló el obispo a Radio Bio Bío.
Consultado sobre la necesidad de los mapuches de contar con la mediación de la Iglesia Católica, indicó que "ahí tienen más confianza, pero es solamente algo fraternal y nada más, porque el intendente y el Gobierno deben mediar, pero nosotros no, yo no he llegado a ningún otro terreno sino acompaño solamente, ayuda humanitaria".
La autoridad eclesiástica y la Cruz Roja Internacional participaron como garantes tanto en la entrega como en el traslado del cuerpo, debido a la desconfianza de los comuneros hacia la policía.
El cadáver de Catrileo, muerto esta mañana en medio de un nuevo ataque incendiario en el fundo Santa Margarita del agricultor Jorge Luchsinger, permanecía en medio de un bosque, hasta donde sólo habían podido acceder el sacerdote, el defensor público José Martínez, el fiscal militar Pinto Aparicio y un representante de la Cruz Roja Internacional.
Posteriormente, llegó hasta el lugar personal del Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones, con el objetivo de realizar los primeros peritajes.