SANTIAGO.- "Yo veo que esa noche un hombre está llevando en brazos a la nena, lo que menos me iba a imaginar es que era el padre", dice Emilce Oliva, vidente que afirma haber colaborado con la agencia de detectives Método 3, contratada por los McCann para encontrar a Madeleine, de la que después se apartó debido a que "ponían las manos en el fuego por los padres" de la niña.
Explica que, gracias a su habilidad, puede ver a través de los ojos de la niña y en su entorno y afirma que la noche de su desaparición sólo percibe la presencia de los padres y de otro individuo, que sería un amigo de la pareja. Su visión, que concuerda con varias de las hipótesis, es que la menor fue sedada por los McCann.
La vidente argentina, residente en España, relata a Emol que el 3 de mayo de 2007 Madeleine no durmió en su habitación, sino que en la de los padres. Dice que lamentablemente no puede captar todos los detalles, por lo que no ve cuando el matrimonio la seda, pero presume que esto ocurrió por la forma en que actuaron.
"Lo presumo por la reacción de la mamá, porque la noche que desapareció Madeleine la madre todo el tiempo estaba controlando la respiración de los hermanitos para ver si respiraban, a los tres los sedaban para poder salir a comer", dice.
Describe que "lo que pasó esa noche fue un accidente, la nena fue sedada de más". "Por lo que yo veo que la madre trata de hacer reaccionar a la nena, la mueve, la sacude, la golpea, ahí es donde le salta sangre de la nariz y salpica las paredes, la madre la pone en el sillón, que es donde encontraron sangre", señala.
Explica que cuando la acuestan en el sillón, la menor "ya está medio muerta". "Ahí la cargan en el coche y la nena muere por el camino porque la iban a llevar a urgencia, los padres sabían de que la podían salvar. Y como se muere, vuelven con el cuerpo de la nena y simulan el rapto", sostiene la vidente.
Escondieron el cuerpo en una iglesia
Emilce afirma que los padres escondieron el cuerpo, al parecer, en una iglesia del sector. "Yo los veo a ellos de que van para el lado de la iglesia, para mí ellos esconden el cuerpo, y después bajan un poco más para el lado del mar, la pusieron en una bolsa dentro de esas valijas de plástico duro y la tiraron al mar", indica.
Detalla que cuando se deshacen del cadáver sólo está presente el padre y un amigo. "La madre sabe lo que pasa, pero ahí veo al padre". Describe el lugar como "un barranco bastante alto, debajo está el mar y se puede llegar ahí en coche". Dice ver al padre "desconsolado". "Pero son así ellos, decidieron hacer eso".
A pesar de la aparenta frialdad con la que habrían actuado los padres, la vidente enfatiza en que la muerte fue accidental. "Hay que pensar que ellos estando en un país extranjero, que tienen una buena posición, y que van a quedar detenidos por haberlos sedado, no les quedó otra que fingir un rapto", indica.
Tras sus visiones, Emilce dice que fue a Portugal a verificar las imágenes que percibía y elaboró un mapa con el recorrido que hace el padre con la niña en brazos. Dice que percibe a un testigo, "veo que hay una persona que ve al padre cargando a la nena".
En su opinión, "hay gente del entorno que sospecha y alguno de los amigos va a romper el silencio". Dice que lo importante ahora es encuentrar el cuerpo. "No es tan difícil, la corriente la puede arrastrar, tiene que salir, alguien de casualidad la va a encontrar".
Consultados vía telefónica por Emol, en la agencia Método 3 no confirmaron si Emilce Oliva efectivamente había colaborado con ellos en la investigación del caso Madeleine McCann, señalando escuetamente que se trata de "información confidencial".
El relato de Emilce no concuerda con el de Isabel Cristina Ávila y la propia vidente argentina lo recalca. Dice que se enteró a través de Emol de la hipótesis de la psíquica de Chimbarongo y que su visión es errada.
"Yo le tengo mucho respeto porque se ve que es una mujer que hace mucho que trabaja. Yo coincido con ella en que la nena está en Praia da Luz, pero es imposible que Madeleine se haya ido solita caminando", dice Emilce.
Señala que Isabel Cristina sostiene esta idea porque "no conoce cómo es el complejo (donde se hospedaban), entonces tendría que haber viajado a Portugal, no sé por qué no lo hizo".
Describe que el resort como un lugar "muy cerrado y pequeño, con vigilancia, con mucha gente transitando, muy iluminado, es imposible que una criatura se haya ido solita sin que nadie la vea y menos a esa hora en verano".