José Alvújar, El Mercurio
VALPARAÍSO.- El comandante en jefe de la Armada, almirante Rodolfo Codina, señaló este lunes que la institución no tiene que pedir perdón por las violaciones a los derechos humanos cometidas durante el gobierno militar.
La justicia chilena mantiene abierta la investigación sobre vejámenes cometidos a bordo del buque Escuela Esmeralda, utilizado como centro de detención y torturas, durante dicho período.
Codina, que el próximo 18 de junio será reemplazado por el almirante Gustavo González, aseguró que no es la Marina la que tiene compromisos pendientes con el país ni con las violaciones a los DD.HH., y sostuvo que “en ese tema hemos avanzado mucho”.
Indicó que los casos pendientes en la justicia son investigaciones por delitos cometidos por personas, y no por la institución, y en ese sentido recalcó que no es la Marina la que debe pedir perdón.
"Los perdones generales a mi gusto no corresponden porque la institución la componen 22.000 personas. Yo no podría pedir disculpas por los 22 mil, porque muchos no tienen ninguna injerencia en estos temas”, declaró.
Sin embargo, reconoció que para la opinión pública el tema “no está terminado”. "Eso será labor del nuevo comandante en jefe. Creo que son cosas que se avanzan durante el mando de uno y después vendrá el otro jefe que tendrá que terminar”, indicó.