El Pingüino de Humboldt es una especie catalogada vulnerable y protegida por la legislación chilena.
El MercurioSANTIAGO.- Como una "barbarie" y una decisión que "pone consideraciones económicas y privadas por sobre el interés nacional en contra de los deseos y aspiraciones ciudadanas y el resguardo de un ecosistema único existente en la zona", catalogó el Comité Nacional Pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff) la aprobación de la instalación de la termoeléctrica Barrancones en la caleta de Chungungo, a 21 km de Punta de Choros.
El Codeff sostiene que la decisión adoptada el martes por la Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) de la Región de Coquimbo, "pone en alto riesgo la vida del 80% de la especie Pingüino de Humboldt (Spheniscus humboldti) en el mundo, especie catalogada vulnerable y paradójicamente protegida por la legislación chilena. Además, es hábitat de especies terrestres amenazadas y en peligro de extinción, como el puma y el guanaco".
El proyecto de la multinacional franco-belga Suez Energy considera una inversión de US$ 1.100 millones y fue presentado al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental en diciembre de 2007 y debía ser votado originalmente en octubre del año pasado. Sin embargo, en ese entonces la empresa solicitó posponer el trámite, señalando que necesitaba completar la recolección de datos para responder cabalmente a una serie de reparos formulados por la Corema.
En ese sentido, el director ejecutivo de la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama), Ignacio Toro, aseguró que el proyecto de la central termoeléctrica cumple con todas las normas ambientales.
"Al proyecto se le han puesto altas exigencias (...) cumple con la normativa ambiental de directrices internacionales y habrá un seguimiento y fiscalización rigurosos", señaló Toro.
Otras de la razones que da la Codeff para la revisión del permiso, es que "las Islas Choros, Damas y Chañaral fueron declaradas como Reservas Marinas el 26 de octubre de 2007 con el objeto de conservar y proteger los ambientes marinos representativos del sistema insular constituido por estas tres islas (...) en busca de la conservación del equilibrio y continuidad de los procesos bioecológicos".
El Codeff trabajó en el pasado intentando infructuosamente que esta zona fuera declarada Parque Marino protegido, pero no tuvo éxito.
"Esta reserva representa un 40% de la superficie de aguas marinas protegidas del centro y norte de Chile. Es una reserva marina pionera para nuestro país, ya que cuenta con el primer Plan General de Administración para reservas marinas. Chile actualmente posee sólo un 0,03% de áreas marinas protegidas, por lo cual la contribución de esta reserva es importantísima para el objetivo de protección del 10% de los ecosistemas marinos, acordado por el Gobierno chileno en el marco del convenio de biodiversidad (CBD) del año 2002", añade el comité.