Junji asegura que fiscalizó jardín Mandarino y que padres no denunciaron irregularidades

SANTIAGO.- Pese a las quejas que ex apoderados del jardín infantil Mandarino han manifestado sobre su funcionamiento luego de la trágica muerte del menor de 3 años Borja López Ojeda, la directora regional Metropolitana de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji), Guida Rojas, aseguró que ese establecimiento había sido fiscalizado dos veces el año pasado y que ningún padre presentó una denuncia.

De acuerdo a lo indicado por la autoridad, la Subsecretaría de Transportes es la encargada de fiscalizar la movilización escolar, pero la Junji habría podido actuar en ese jardín si algún apoderado hubiese acusado la existencia de un sistema informal, para el que incluso contaba con un reglamento donde se establecía, entre otros, el recorrido de los autos y su horario.

"Si hubiera habido un documento que dijera 'los niños son transportados en vehículos particulares', evidentemente que ahí altiro habríamos dicho 'esto es absolutamente ilegal, no cumple con la normativa de la Subsecretaría (de Trasportes) y, por lo tanto, revocamos el empadronamiento hasta que eliminen ese sistema'. Pero nunca tuvimos ni denuncia ni acceso a ese documento o reglamento mostrado ayer", aseguró Rojas.

En entrevista con Emol, destacó que regularmente las autoridades acuden a los jardines para revisar que todo funcione en su interior de acuerdo a las normas, pero que en diversas ocasiones lo hacen gracias a las denuncias de los propios apoderados, que se preocupan por las condiciones físicas o ambientales donde se educan los niños.

En ese sentido, remarcó que los padres son los principales vigilantes de los menores y por ello la Junji enviará una circular a todos los recintos de párvulos del país -sin excepción- para que su comunidad "reflexione en torno a la seguridad de los niños en los transportes escolares".

"Necesitamos seguir haciendo visible la necesidad de que los padres se involucren como primeros supervisores y primeros fiscalizadores tanto de la calidad de la educación que reciben sus hijos, como de lo que ocurre al llegar al jardín infantil, en el trayecto y cuando regresan a casa", manifestó Rojas.

Mientras, la parvularia que transportó al pequeño Borja y que "olvidó" sacarlo de su auto por causas que aún se investigan, seguirá recluida en un recinto de Gendarmería a la espera de que mañana viernes la Corte de Apelaciones se pronuncie sobre su libertad.