El juez Fernando Valderrama habría sido increpado por familiares de dos de los formalizados por el caso Bombas.
AgenciasSANTIAGO.- Un insólito hecho se vivió durante la tarde de este lunes en el Octavo Juzgado de Garantía cuando se revisaba la medida cautelar sobre los imputados Felipe Guerra y Carlos Rivera, quienes están formalizados en el denominado caso Bombas en la que se indaga la colocación de explosivos en la capital.
Una vez que se confirmó la prisión preventiva para el primero y se decretó la libertad del segundo imputado, familiares y amigos de los anarquistas -presentes en la audiencia- comenzaron a increpar a los fiscales.
El ambiente tenso y hostil terminó cuando los individuos gritaran al magistrado Fernando Valderrama, quien lideró la audiencia, "muérete juez culiao, hijo de puta". Acto seguido el representante del Poder Judicial decidió desalojar la sala, ordenando a los gendarmes sacar a los individuos del tribunal.
La mencionada frase motivó a que los fiscales Pablo Sabaj y Francisco Rojas informaran de lo ocurrido a su superior, el jefe regional de la zona sur Alejandro Peña.
Este último tras contactarse con el magistrado decidió abrir una investigación en contra de los responsables de los improperios por el delito de desacato.
Cabe recordar que esta audiencia responde a la anulación de la realizada la semana en la que se había dejado en libertad a ambos imputados, pero un vicio procesal de la jueza Ema Tapia obligó a que se realizara una vez más la revisión de cautelares.
Pese a quedar en libertad, Carlos Rivera quedó sujeto a firma quincenal y prohibición de salir del país.