LONDRES.- Un virus común que produce llagas podría ser una nueva arma para luchar contra el melanoma metastásico, un cáncer de la piel que se disemina a otras partes del cuerpo, dijeron el viernes investigadores en Escocia.
El virus del herpes simple pertenece a la familia de virus que portan un ADN que causa infecciones. Virus similares son el herpes genital, el herpes zoster y la varicela.
Los médicos ya están usando el virus del herpes simple para tratar a los pacientes con glioma, un tipo de cáncer cerebral. Ahora, una investigación de científicos de la Universidad de Glasgow, en Escocia, demostró que un virus desactivado del herpes, es decir, que no causa llagas, puede matar las células del cáncer de la piel.
"Hemos demostrado que si el virus entra en contacto directo con las células cancerosas, las mata", dijo a Reuters la profesora Rona MacKie.
La profesora añadió que este descubrimiento jugará un papel en el tratamiento del melanoma, aunque no se sabe aún en qué fase del cáncer se puede empezar a aplicar este procedimiento.
MacKie examinó la acción del virus desactivado del herpes en cinco pacientes con melanoma, que es la forma más letal del cáncer de la piel.
El cáncer se había diseminado en todos los pacientes, quienes tenían tumores secundarios cerca de la superficie de la piel.
Los investigadores inyectaron los virus desactivados y una solución salina directamente en dos tumores de cada paciente para comparar los resultados.
Los investigadores variaron el número de inyecciones y el período de administración de las mismas. Al extirpar los tumores y examinarlos, descubrieron que el virus había hecho lo que ellos esperaban: matar las células del melanoma.
El número de células destruidas fue mayor en los pacientes que recibieron más inyecciones.
"Es aún muy pronto", dijo MacKie, pero lo fundamental es que el virus no afectó al organismo y que mató las células cancerosas, añadió.
MacKie explicó que el virus del herpes ataca por lo general a dos tipos de células. Unas son las células derivadas del sistema nervioso, como las del melanoma, y otras son las que se dividen muy rápidamente, como las células cancerosas.
Ahora que los investigadores han demostrado que el tratamiento no tiene riesgos, están planeando más pruebas clínicas para determinar cuál sería la dosis óptima.
Los melanomas suponen sólo el 10 por ciento de los tipos de cáncer de la piel, pero causan hasta el 85 por ciento de las muertes debido a este tipo de cáncer.
El melanoma ha aumentado más en la última década que ningún otro tipo de tumoración maligna, excepto el cáncer de pulmón en las mujeres.
Tomar el sol y exponerse mucho a los rayos solares ultravioletas A y B es peligroso y aumenta el riesgo de melanoma. La mitad de los casos se dan en personas menores de 50 años, concluyeron los autores.