NUEVA YORK.- Un empleado de un restaurante neoyorquino, que ni siquiera terminó la escuela secundaria, ha sido acusado por la policía de Nueva York de utilizar la Internet para robar millones de dólares a celebridades y magnates, reportó el martes el diario New York Post.
El diario, que cita a detectives de la policía neoyorquina, indica que Abraham Abdallah, de 32 años, fue arrestado en febrero, acusado de "dirigir el mayor robo de identidades en la historia de la Internet".
El ladrón cibernético utilizó una computadora de una biblioteca de Brooklyn y la lista de los "más ricos" de la revista Forbes, para suplantar la identidad de celebridades, millonarios y ejecutivos, explica el diario.
El ayudante de camarero, que fue detenido cuando iba al timón de su vehículo Volvo último modelo, robó a más de 200 personajes de la lista de "la gente más rica de Estados Unidos", de Forbes, indica el Post.
Según la investigación, el supuesto ladrón cibernético violó las cuentas bancarias y tarjetas de crédito de celebridades, entre las cuales el realizador Steven Spielberg, el presidente ejecutivo de Disney, Michael Eisner, y el millonario George Soros.
Entre sus víctimas figuran también el ex candidato presidencial Ross Perot, la presentadora estrella de la televisión estadounidense, Oprah Winfrey y el fundador de la cadena de televisión CNN, Ted Turner.
La policía dijo que arrestó al ayudante de camarero el 23 de febrero, después de vigilarlo durante seis meses.
La investigación reveló que Abdallah utilizaba teléfonos celulares con acceso a la Internet.
"Fingía ser cualquier otra persona, cuando en realidad estaba en Nueva York, a veces trabajando en la cocina de un restaurante", dijo al diario una fuente de la policía.
Incluso logró penetrar los sistemas de compañías calificadoras de crédito, tales como Equifax y Experian, y obtuvo allí datos de sus víctimas, que utilizó luego para "clonarlos" y acceder a sus cuentas abiertas en algunos de los más grandes bancos de inversiones estadounidenses, como Merrill Lynch y Goldman Sachs, revela la investigación.
El ladrón cibernético logró así obtener datos como el número de seguro social de sus "víctimas", y el nombre de soltera de sus madres.
Según el Post, Abdallah ha negado los cargos. Su caso ha pasado a la justicia federal, que va a acusarlo de fraude, concluyó el diario.