WASHINGTON.- Un profesor de leyes de la Universidad de Boston fue designado mediador entre Microsoft Corp. y el Gobierno norteamericano, en procura de dar una rápida salida al emblemático caso antimonopolio que enfrenta el gigante del software.
En una orden emitida a última hora del viernes, y divulgada el sábado, la jueza federal Colleen Kollar-Kotelly designó al profesor Eric Green, quien enseña negociación y mediación en disputas legales, para que trate de lograr que las partes se pongan de acuerdo en las próximas semanas.
La jueza dijo que si no hay acuerdo hasta el 2 de noviembre, ella convocará a audiencias para marzo de 2002 en las que determinará las sanciones contra Microsoft por haber mantenido ilegalmente su monopolio en el mercado de los sistemas operativos de computadoras personales.
Desde que se hizo cargo del caso, Kollar-Kotelly ha instado a la compañía, al Departamento de Justicia de Estados Unidos y a 18 estados que comparten la acusación federal a trabajar duro para alcanzar un acuerdo sin otra intervención de la justicia.
A fines de septiembre, la jueza dio a las partes plazo hasta el 12 de octubre para que logren un entendimiento o designen a un mediador para poner fin a la disputa de tres años.
Otras negociaciones fracasaron en 1998 y derivaron en la demanda judicial contra la compañía de software más grande del mundo.
También terminaron en fracaso una jornada de intensa negociación en 1999 y una mediación de cuatro meses a principios de 2000 dirigida por el juez de Chicago Richard Porner.
Al designar a Green, Kollar-Kotelly dijo que estaba satisfecha, después de una conferencia telefónica con las partes, por la disposición a lograr un acuerdo.
"Sin embargo (...) la corte urge a las partes a continuar sus esfuerzos por alcanzar una solución mutuamente aceptable", dijo la jueza.
El caso está de manos de la jueza desde agosto, después de que una corte federal de apelaciones concluyera en junio que Microsoft había mantenido ilegalmente su monopolio.
Microsoft desafió ese fallo con una apelación a la Corte Suprema, pero este tribunal anunció el pasado martes que no revisará la decisión de la corte de apelación.
La compañía había sostenido que la Corte de Apelaciones debería haber desechado el fallo original del caso, emitido el año pasado por el juez de distrito Thomas Penfield, a quien acusó de inconducta por hacer declaraciones a la prensa en pleno proceso.
La Corte de Apelaciones reprendió a Jackson y revirtió su orden de que Microsoft sea dividida en dos, pero al mismo tiempo respaldó unánimemente el fallo de Jackson en sentido de que Microsoft había utilizado tácticas ilegales para defender su monopolio.
El Gobierno dijo que ya no buscará la división de Microsoft y que buscará en cambio otras sanciones.
Entre esas sanciones, podría estar la prohibición de que Microsoft amenace e intimide a los fabricantes de computadoras personales que apoyen programas rivales y la orden de que el código fuente del sistema operativo Windows sea abierto a los fabricantes de programas de computación.