ALEXANDRIA, EE.UU.- La tecnología y la Internet se han convertido en armas poderosas destinadas a la búsqueda de niños perdidos o secuestrados, aumentando las tasas de recuperación de los casos más serios y urgentes en Estados Unidos en más de 90 por ciento, dijeron expertos.
El año pasado, unos 723.000 niños fueron reportados desaparecidos en Estados Unidos. Muchos casos son pequeños que se pierden por poco tiempo y son rápidamente localizados. Pero unos 160.000 infantes al año son raptados por otros miembros de la familia, usualmente inmersos en disputas de custodias.
Entre 4.000 y 5.000 son secuestrados por extraños, muchos con intenciones sexuales.
"En la búsqueda de un niño desaparecido, el tiempo es lo más importante. Mientras más tiempo lleve el niño desaparecido, menores son las posibilidades de una recuperación segura", dijo Ernie Allen, presidente del Centro Nacional de Niños Desaparecidos y Explotados.
En años anteriores, cuando se reportaba un niño desaparecido, llevaba semanas el distribuir fotos por toda la nación. Si un niño era sacado del país, las posibilidades de identificación y recuperación eran mínimas.
Actualmente, una foto puede escanearse en una computadora y enviarse a todo el mundo en cuestión de minutos.
El sitio de Internet del centro, Missingkids.com, recibe tres millones de visitas diarias y opera una línea dedicada las 24 horas del día. Los resultados han sido contundentes.
"En 1990, nuestra tasa de recuperación para los casos más serios y urgentes era de 62 por ciento, lo cual era muy bueno en ese entonces. Ahora, la tasa de recuperación es de hasta 94 por ciento y la causa más importante de esa mejora es la tecnología", dijo Allen.
En el laboratorio informático del centro, el ex policía Steve Loftin trabaja en el envejecimiento digital de imágenes de niños que han estado desaparecidos por varios años.
"Con el uso de fotos disponibles de los padres cuando eran jóvenes y el empleo de nuestro conocimiento sobre factores hereditarios y del proceso de envejecimiento, podemos alargar, recortar, pegar imágenes, convirtiendo la imagen de un niño de cinco años en como sería de un adolescente de unos 17 años", explicó Loftin.
Algunas veces, cuando se encuentra al niño, la imagen computarizada es notablemente similar, a pesar del hecho de que Loftin tiene que hacer adivinanzas acerca de factores como el corte del cabello y el desarrollo de los dientes.
Esas imágenes colocadas en envases de leches o tarjetas puede dar nueva vida a casos de larga data.
Una de estas imágenes modificadas digitalmente ayudaron a la recuperación de Johnny Tello, seis años después de que fuese llevado por la fuerza por su padre de su casa en Illinois en 1993, cuando tenía tres años.
Después de seis años de infructuosa búsqueda, el centro recibió una pista de una llamada anónima en 1999 que sugirió que el chico se había inscrito en una escuela en Texas.
La policía mostró una de las imágenes procesadas de Johnny y uno de los miembros del equipo escolar lo reconoció como "Huber", un estudiante que vivía con un padre soltero.
Cuando fue confrontado con la policía, el padre confesó y Johnny se reunió con su madre.
Los técnicos también reconstruyen imágenes de restos de esqueletos.
En un caso, la policía de Nevada halló una calavera que se creía era de un adolescente varón.
Cuando se reconstruyó el rostro digitalmente y se mostró en la televisión, un hombre llamó y dijo que pensaba que era un hijo desaparecido.
Las pruebas de ADN confirmaron la identificación.