LONDRES.- La Campaña Tíbet Libre (Free Tibet) criticó hoy desde Londres la decisión de las autoridades locales chinas de no aprobar la apertura este año de nuevos “cibercafés” con vistas a los próximos Juegos Olímpicos en ese país.
Esa medida es “sólo el último de una serie de ataques a la libertad de prensa y de Internet” por parte de las autoridades chinas, denuncia esa organización.
Al mismo tiempo representa “un nuevo golpe a la credibilidad del Comité Olímpico Internacional (COI) cuando afirma que los Juegos Olímpicos del 2008 mejorarán la situación de los derechos humanos en China”, agrega el comunicado.
Tíbet Libre recuerda que en junio del 2005, China anunció su proyecto de vigilar los foros y espacios de “chat” en Internet además de los “blogs” para controlar las informaciones difundidas por esos medios.
En septiembre del 2006, añade la nota, la agencia china Xinhua anunció sus nuevas competencias a la hora de regular la distribución en el interior de China de noticias de agencias extranjeras.
En diciembre de ese mismo año, el diario “China Daily” informó de que los periodistas extranjeros que quisiesen viajar al Tíbet y Xinjiang seguían obligados a recabar un permiso especial pese a las seguridades dadas tres meses antes por el jefe de prensa de los Juegos Olímpicos, Sun Weija, de que no habría restricción de movimientos.
"Siete años de seguridades del Comité Olímpico Internacional en el sentido de que mejorarían las libertades de los medios de comunicación y de internet en la fase preparatoria de los Juegos no han conducido a ninguna parte,” critica Matt Whittcase, de la Campaña Tibet Libre.
"Interesado únicamente en los enormes beneficios que generarán los Juegos en China, el COI ha hecho caso omiso de la brutal y creciente represión de la libertad de información,” agrega Whittcase.
Éste acusa al máximo organismo del deporte internacional de "complicidad con los abusos de los derechos humanos en el Tíbet y la propia China” ya que este país “sabe que puede actuar impunemente”.
"El COI, reclama Whittcase, debe insistir en que las autoridades chinas cumplan sus compromisos en materia de libertad de prensa si quiere evitar que se empañen los Juegos irremediablemente por su asociación con uno de los regímenes más represivos del mundo”.