CIUDAD DE MÉXICO.- Científicos mexicanos anunciaron el hallazgo en el estado de Chiapas de un fósil de un pez que vivió hace 90 millones de años y que fue identificado como un nuevo género.
El fósil fue encontrado en la localidad El Chango, según informó en una conferencia de prensa el biólogo Marco Antonio Coutiño, director del Museo de Paleontología de Chiapas.
Los científicos bautizaron al nuevo pez como "Sapperichthys chiapanensis", en honor a Karl Theodor Sapper (1866-1945), naturalista y topógrafo alemán, pionero en la descripción de la geología y paleontología de Chiapas.
Coutiño explicó que el fósil pertenece a la familia de los Gonorhychidae del orden de los Gonorynchiformes, pero por sus características constituye un nuevo género y una nueva especie para la ciencia. El Sapperichthys chiapanensis habitó las aguas en la era Mesozoica cuando abundaban en la tierra los dinosaurios.
En Chiapas, que entonces tenía una parte de su territorio sumergido en un mar cálido profundo, "proliferaron un sinnúmero de formas marinas, entre las que se encuentran los peces que dejaron fe de su existencia a través de fósiles".
El fósil hallado en El Chango mide de 15 a 20 centímetros de largo y carece de aleta caudal. Entre las características más importantes para considerarlo un nuevo género y especie es que, diferencia de los demás Gonorynchiformes, el opérculo es redondeado.
En su borde posterior presenta una serie de espinas similares a las de la especie Charitopsis spinosus del mismo orden localizada en el Líbano, explicó el biólogo Bruno Andrés Than Marchese, estudioso de la pieza.
Los hallazgos acumulados en casi dos décadas han "permitido formar una colección científica de más de 250 peces óseos fósiles, de los cuales se han identificado 15 especies diferentes, provenientes de yacimientos del Cretácico tardío, de los municipios de Ocozocoautla, Palenque y San Cristóbal de las Casas", dijo Coutiño.
En su opinión, el hallazgo de este nuevo fósil es de "suma importancia porque se recrean los ambientes marinos en ese entonces", además de acrecentar el valor del patrimonio paleontológico de Chiapas.
Junto con otras singulares piezas, el fósil se encuentra a la vista del público en el museo de Paleontología Eliseo Palacios Aguilera en Tuxtla Gutiérrez, capital de Chiapas.