La Presidenta Michelle Bachelet junto al Premio Nobel de Física 2011, Brian Schmidt.
PresidenciaSANTIAGO.- La presidenta Michelle Bachelet, que recibió ayer en el Palacio de La Moneda al Premio Nobel de Física 2011, Brian Schmidt, encargó a los científicos chilenos estudiar la construcción de un telescopio propio aprovechando que Chile tiene los cielos más nítidos del mundo.
Así lo informó el presidente de la Comisión Desafíos del Futuro, el senador Guido Girardi, quién también estuvo presente en la reunión junto al director del Instituto Milenio de Astrofísica, Mario Hamuy.
Tras la cita, Brian Schmidt, afirmó que con la mandataria "conversamos sobre cómo hacer la educación más equitativa y la importancia que tendrá para el futuro de Chile la astronomía y la astrofísica y por ello la necesidad de formar científicos que deben ser líderes en estos ámbitos. Este es el mejor momento para que Chile invierta en su futuro capacitando personas en ciencia y astronomía", aseveró.
En la misma línea, Girardi expresó que "Chile tiene la oportunidad de estar a la vanguardia de la ciencia, pero debe invertir en ello".
El parlamentario agregó que actualmente desde Chile "se observa para países y astrónomos que están en otras latitudes, pero si desarrollamos nuestra propia capacidad de observación podemos ser líderes en el mundo en esta materia y este pequeño país puede tener un rol crucial en el futuro de la especie y de la humanidad. Desde aquí se tomarán las decisiones de los rumbos que se deben tomar".
A juicio del senador, la futura construcción de un telescopio es una gran oportunidad científica de poner a Chile en un sitial privilegiado en la astronomía.
Sobre el mismo tema, el astrónomo Mario Hamuy, explicó que la propuesta que le presentará a la mandataria consiste en construir un telescopio complementario al Gran Telescopio de Exploración Sinóptica (LSST).
El astrónomo detalló que con el LSST se podría analizar al detalle la luz de los objetos que descubra el lente "lo que nos pondría a nosotros en una ventaja respecto del resto de la comunidad científica porque al tener nuestro propio telescopio podríamos definir nuestra agenda científica".
Hamuy agregó que un proyecto de ese tipo sería un telescopio de 6 metros de diámetro, diseñado y construido desde Chile que podría costar unos 100 millones de dólares.
También afirmó que para su construcción es posible buscar alianzas con otras organizaciones internacionales para traer la tecnología que el país no tenga, "pero que en conjunto se puede llevar a cabo un proyecto liderado desde Chile".
"Ello nos daría una ventaja para liderar la astrofísica y ponernos en la frontera del conocimiento astrofísico de la próxima década. Ella (Bachelet) escuchó con mucha atención e incluso me dijo: Mario prepara un proyecto", afirmó.