SANTIAGO.- Tal como se suponía, el representante de la Nueva Izquierda, Camilo Escalona, fue electo como el nuevo presidente del Partido Socialista, por el comité central de la colectividad de gobierno, en votación secreta.
Escalona, quien asume la dirección de su partido por tercera vez, estará acompañado de una directiva "integrada" en la que confluyen varias corrientes del Partido Socialista.
Es así como la abogada Pamela Pereira estará a cargo de la secretaría general, y los parlamentarios Juan Bustos, Juan Pablo Letelier e Isabel Allende, ocuparán las vicepresidencias.
De este modo, también quedan representadas las sensibilidades conocidas como terceristas -Letelier-, colectivo -Pereira- y megatendencias -Bustos y Allende-.
Lo primero que aclaró Camilo Escalona, en el discurso en que anunció que la lista presentada por él fue electa por el comité central para conducir los destinos del Partido Socialista en los próximos dos años, fue que la gestión que inicia hoy es la última, pues no postulará para el período que sigue.
En una actitud mucho más moderada de la que acostumbra, Escalona reconoció que la Concertacion venció a la derecha durante la segunda vuelta presidencial "sin despejar la sensación de una suerte de empate político", lo que habría contribuido a que "parapetadas en esa imagen, las fuerzas mas conservadoras del país se están dando mana, para bloquear, obstaculizar e intentar maniatar la acción del Presidente Ricardo Lagos", de manera de "utilizar los efectos negativos de la recesión económica en el país para producir una violenta regresión social en Chile".
Añadió que la derecha no quiere compartir los costos de la crisis económica que atraviesa el país y "una vez más pretenden que ese costo lo paguen exclusivamente los sectores populares", lo que a su juicio queda confirmado con el "bloqueo" que la oposición ha realizado a las reformas laborales y su actitud ante el proyecto de reforma a la salud la que "pretenden boicotear".
"Por eso quieren el desprestigio profundo de la política, para que ésta no pueda cumplir su acción social y, por eso, quieren además que el sistema de partidos políticos no cumpla su función y tengamos partidos pequeños, desprestigiados, anulados en la tarea de una fuerza política y social democrática, como debe ser la Concertación", sostuvo categóricamente el nuevo timonel del PS.
Bajo tales argumentos, Escalona recalcó que el compromiso del partido debe ser bregar "porque se detenga esta arremetida (de la oposición), se detengan las oleadas de despidos (...) y convocar a un esfuerzo nacional, del conjunto del país, para que podamos sacar adelante la tarea económica, manteniendo los niveles de crecimiento, elevando la producción, pero, por sobre todas las cosas, disminuyendo la cesantía y el desempleo".
Por otra parte y para iniciar su gestión propuso al comité adoptar dos resoluciones: enviar el apoyo "solidario" del partido a los trabajadores de la empresa Fabisa, donde producto de la huelga falleció un obrero, y solicitar al Gobierno una profunda modificación lo que llamó la "cultura policial".
En la relación del partido con el Gobierno, Escalona recalcó que "somos un actor esencial del futuro democrático de este país y trabajaremos con lealtad democrática para respaldar al Presidente Lagos. Con lealtad democrática que significa, no la incondicionalidad irracional de quienes no piensan, sino la lealtad democrática de quienes tienen un proyecto político, un sentido de país, una visión nacional, un compromiso con el mundo popular".
Por ello, insistió, el PS trabajará con una "crítica comprometida de los que somos parte de este esfuerzo".
Camilo Escalona valoró también la gestión del saliente timonel, senador Ricardo Nuñez, debido al difícil período -dijo- que le correspondió dirigir el partido, aludiendo a la detención del general (r) Augusto Pinochet y a la campaña presidencial.
Por su parte, el ahora ex presidente Ricardo Nuñez en la cuenta de su gestión, previa a la elección de la nueva directiva, manifestó que el PS es "una fuerza moral que tiene sentido ético ante la realidad", por lo que en los temas de derechos humanos "seguiremos exigiendo verdad y justicia".
Recalcó que la Concertación es la alianza, "con todas sus diferencias", que debe hacer posible el éxito del actual Gobierno, por lo que es importante revalorizarla.
En el ardor de su discurso, Nuñez le envió un mensaje a la derecha, precisando que "no va llegar al gobierno de Chile porque el principal obstáculo que tendrá que vencer será a los socialistas".
Y coincidió con lo señalado posteriormente por Escalona, en torno a que el PS le debe lealtad al Gobierno. "Lealtad que no hay que confundir jamás con obsecuencia", concluyó.