MIAMI.- El Servicio de Inmigración y Naturalización de EE.UU. (INS) confirmó hoy que liberó en Florida a un segundo cubano implicado en el asesinato en Washington del ex canciller chileno Orlando Letelier en 1976.
José Dionisio Suárez Esquivel, de 62 años, salió en libertad el martes pasado de un centro de detención del INS en Bradenton, al sur de Tampa, en la costa oeste de Florida, tras cumplir ocho de los doce años a los que fue condenado por el crimen.
Suárez Esquivel es el segundo implicado en el atentado, en el que también murió la secretaria de Letelier, la estadounidense Ronnie Moffitt, en ser puesto en libertad en Florida.
El mes pasado, el INS liberó al exiliado cubano Virgilio Paz Romero, también condenado a 12 años de prisión por el atentado, que, según los fiscales estadounidenses, fue instigado y preparado por los servicios de inteligencia del Gobierno del general (r) Augusto Pinochet.
Ambos cubanos se declararon culpables de conspiración en el doble asesinato, por lo que recibieron una condena menor.
Letelier, quien fue canciller durante el Gobierno socialista del Presidente Salvador Allende, fue asesinado en Washington el 21 de septiembre 1976 junto a su secretaria, al explotar una bomba cuando conducía su propio automóvil.
Suárez Esquivel, al igual que Paz Romero, fueron liberados en virtud de un fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos que declaró inconstitucional la detención indefinida de ex convictos extranjeros ante la imposibilidad de ser deportados.
A pesar de haber cumplido con el tiempo de condena requerido por la justicia, ambos pasaron bajo la custodia del INS a finales de los noventa debido a la ausencia de acuerdos con Cuba para repatriar a los ciudadanos de ese país que hayan cometido delitos en Estados Unidos.
En declaraciones a la prensa local, Suárez Esquivel dijo sentirse feliz de ser libre porque podrá abrazar a su familia.
"Este es un día fantástico para mí, porque podré abrazar a mi familia y a mis hijos", dijo el cubano.
Fiscales federales dijeron que el asesinato de Letelier y de Moffitt fue obra de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) chilena, y sus ejecutores fueron exiliados cubanos.