El cadáver de Silverio Amador Avendaño Huilipán fue el último en ser encontrado. |
LOS ÁNGELES.- En los faldeos del volcán Antuco se encontró esta tarde el cadáver del último soldado desaparecido en la peor tragedia en tiempos de paz del Ejército.
Se trata de
Silverio Amador Avendaño Huilipán, soldado que pertenecía a una de las compañías que se vieron afectadas por la tragedia.
Fuentes del Departamento Comunicacional del Ejército no confirmaron de inmediato la versión y aclararon que el comandante en Jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, va a dar una conferencia de prensa a las 17:00 horas.
Otras fuentes de la institución, no obstante, confirmaron a
Emol el hallazgo y la identidad del conscripto.
El joven tenía 18 años y residía en la comuna de Nacimiento.
Informaciones preliminares señalan que su cuerpo apareció en la grieta de una formación rocosa y que alrededor de las 19 ó 20 horas llegará hasta Los Ángeles.
Allí, el comandante del regimiento reforzado N° 17 Patricio Espinoza se reunirá con los familiares para el reconocimiento de rigor, aunque se espera que sea un trámite porque se trata del único joven que permanecía desaparecido.
La tragedia de Antuco ocurrió el 18 de mayo y en ella murieron 44 conscriptos y un suboficial.
Los hechos ocurrieron cuando los oficiales a cargo ordenaron marchar a un grupo de conscriptos, quienes se vieron envueltos en una tormenta de nieve que no pudieron superar, y que en definitiva sesgó la vida de decenas de jóvenes.
Investigación y procesos
La tragedia de Antuco dio lugar a una investigación que encabeza el ministro en visita Juan Arab.
En el proceso ya han declarado más de 100 personas, incluyendo a la mayoría de los reclutas y oficiales sobrevivientes de la tragedia.
El 24 de junio pasado, Arab procesó a siete militares del 17º Regimiento de Los Ángeles por su presunta responsabilidad en la muerte de 44 conscriptos y un sargento en Antuco.
Tres de ellos quedaron detenidos.
Se trata del mayor Patricio Cereceda, sindicado como el que dio la orden de marchar a los reclutas, y sus superiores, el coronel Roberto Mercado y el teniente coronel Luis Pineda.
Fueron procesados por el ministro Juan Arab por el delito de incumplimiento de deberes militares, y, en el caso de Cereceda, por cuasidelito de homicidio.
Arab dictó además procesamientos en contra de los capitanes Claudio Gutiérrez y Carlos Olivares, y del suboficial mayor Carlos Grandón y del sargento Avelino Tolosa, por cuasidelito de homicidio. Los cuatro quedaron en libertad provisional, tras pagar una fianza de 50 mil pesos.
