MADRID.- La muerte, la decrepitud, la infidelidad y la enfermedad se presentan en el nuevo libro de cuentos de Flavia Company, "Con la soga al cuello". El relato enfrenta al lector con personajes que viven situaciones límite, que los muestran tal cual son.
Pese a tratarse de cuentos, todos tienen como hilo conductor esos "momentos bisagra", como los llama Company, y dos de ellos surgen de una novela anterior, "La mitad sombría".
Agrega que el libro tiene una unidad compuesta por las vivencias de diferentes personajes y señala que le interesaba "indagar en cómo las personas, ante un momento difícil, adverso, nos comportamos como quienes verdaderamente somos. Cuando tenemos lo que deseamos, somos quienes deseamos, pero cuando nos toca lo que nos toca, somos quienes somos. Me interesaba ilustrar esa dicotomía con situaciones 'con la soga al cuello'", explica.
Pese a la dureza de muchos de los relatos, Company subraya que su visión sobre el ser humano es esperanzada, con un planteamiento de heroicidad en lo más cotidiano, nada épico.
"Yo no sé si eso va a ser bueno para el libro, espero que sí, porque es el libro más oportuno de mi vida, pero por supuesto no es intencionado", explica Company, ya que en realidad lo terminó hace dos años y medio. Luego "descansó" en un cajón mucho tiempo -cosa que la autora suele hacer con todos sus textos- y esperó hasta ser editado ahora por Páginas de Espuma.
Los protagonistas de "Con la soga al cuello" son poco habituales en la literatura. Ancianos, parejas lésbicas, un hijo que debe cuidar a su padre, desempleados... "Me interesaba iluminar, en el sentido de enfocar, algunas zonas oscuras, marginales, del mundo, en el sentido de que nunca aparecen en ningún lado ni protagonizan la literatura o el cine", señala Company, que vive en Barcelona desde hace unos 30 años.
Otro de los temas muy presentes es el viaje y la transición de una etapa a otra. "Hay una reinvindicación de que uno no puede hacer la vida como si se tratara de un viaje organizado. Uno tiene que hacer la vida con el ánimo de hacerla propia. Cuando vos pensás que la tenés organizada es cuando surge lo que no estaba previsto, entonces no vale la pena, mejor hacer la que uno quiere. Es la reivindicación del espacio de la libertad, y por eso hay ese tipo de personajes que no son habituales".
