“Toda mujer debería probar la depilación ‘brasilera’”, aseguró la actriz de “Desperate Housewives”,
Eva Longoria, hace ya tiempo a la revista America’s Cosmopolitan.
Su declaración no perduraría hasta nuestros días, de no ser que junto con su recomendación, la morena afirmó que desde que se atrevió a probar el doloroso depilado de la zona de su bikini, había mejorado considerablemente su vida sexual.
“La primera vez que lo hice, llevaba como la mitad hecho y fue como ¡para! Pero sí, me encanta (...) Mejora el sexo. Toda mujer debería probar la depilación ‘brasilera” alguna vez, y luego, el sexo que tendrán las hará volver siempre”, señaló.
Hay tantas razones por las que muchas mujeres están optando por depilarse la zona del bikini, como maneras de hacerlo. La más común es la señalada por Longoria, que consiste en la depilación con cera, arrasando con los vellos -total o parcialmente- permitiendo utilizar el hilo dental más descarado de la playa con toda la comodidad del mundo.
Duele, sí. Y sobre todo la primera vez. Pero suele ser una de las maneras más duraderas y, por ende, ideales para quienes no quieren esclavizarse. Sin embargo, es importantísimo hacerlo en un lugar confiable en cuando a su higiene.
“El problema es la utilización de cera que no sea de primer uso. En algunas partes las cuelan y no son estériles. Por lo tanto, ahí hay riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas y que aparezcan furúnculos y otras cosas”, explica el ginecólogo y sexólogo de la Clínica Las Nieves, Simón Dujovne, quien también asegura que no existiría ningún tipo de problema en la zona genital para aquella mujer que ha decidido seguir las tendencias del depilado absoluto.
Como dato aislado, cabe mencionar que el año pasado, el estado de Nueva Jersey estudió la posibilidad de prohibir las depilaciones “brasileras” debido a dos casos de mujeres que habían sufrido lesiones durante el procedimiento.
Cremas y hoja de afeitar, amigables sólo al comienzo
Las maneras que parecen más rápidas e indoloras, son también las menos duraderas y que a la larga pueden provocar más de algún inconveniente.
Es el caso de las cremas depilatorias y hojas de afeitar, con las cuales hay que tener sumo cuidado al afeitar una zona que normalmente es protegida por varios vellos por su condición sensible.
“Las chicas jóvenes están acostumbradas a pasarse la gillete en esa zona para evitar el dolor, pero eso genera muchas veces que el vello se encarne o que se inflame el poro. Además, ese vello puede crear una foliculitis”, comenta la kinesióloga Claudia Rivera, del centro
DermaLaser, de depilación definitiva.
En cuanto a las cremas depilatorias, Rivera señala que muchas veces estas pueden provocar una fotosensibilidad en el área utilizada, por lo que en el caso de tomar sol, podría aparecer manchas. En efecto, se recomienda al utilizar este producto en el rebaje con cuidado de no pasarse al área genital ni perianal.
Láser, lo más caro, pero conveniente
Para Dujovne, la mejor manera de depilarse parcial o totalmente la zona del bikini es, sin duda, con láser.
Lo que realiza éste procedimiento es captar la melamina del vello y llegar hasta la raíz para destruir el folículo piloso.
En Chile es posible encontrar diversos centros e incluso clínicas que ofrecen este servicio, además de distintos tipos de láser. En el caso de Rivera, en su centro utilizan el de
rubí, que, como asegura, es ideal para gente de tez blanca y vellos oscuros, y a diferencia de otros, puede ser utilizado debajo de las cejas, inclusive.
¿Y mejora el sexo? |
Curiosos por saber por qué durante la década de los 90, la depilación brasilera se había vuelto tan popular entre las australianas, la Sociedad de Médicos Estéticos de Australasia (zona que comprende Australia y sus alrededores), realizó una encuesta entre mujeres de 20 y 51 años. De ellas, un 61% afirmó hacerlo porque se sentía más sexy, un 75% por estética y un 17% por algo cultural. La sorpresa de encargados fue mayor cuando notaron que un 60% aseguró que después de depilarse completamente habían experimentado mayor placer en sus relaciones sexuales, y que un 61% se lo recomendó a otras mujeres para mejorar su vida íntima. Consultado ante la posibilidad de que la inexistencia de vello pudiera convertirse en la piedra angular de la sexualidad, Dujovne declaró: “No tiene ninguna ingerencia. Es más que nada una cosa psicológica”.
|
”Si tu tienes una piel bronceada, lamentablemente no se puede hacer depilación, porque se activa la melanina (pigmento de color negro) y podría provocar quemaduras”, asegura la kinesióloga, antes de recomendar tomar sol sólo 30 días después de finalizado todo el tratamiento con láser.
En promedio, y aunque cada persona es evaluada para ver su tipo de piel, grosos y cantidad de vello, en este centro toma 8 sesiones más 8 repasos -en promedio- lograr un 80% de la depilación definitiva en cada zona a tratar. En cuanto a los precios, que actualmente están rebajados en un 50%, la zona del bikini bordea los $200 mil.
Otro de las depilaciones de láser más comunes en el país es el tipo
diodo, que es una de las últimas tecnologías y tiene la facultad de trabajar con pieles más morenas sin mayor dificultad.
“Es una técnica de barrido y no de disparo, ni pelito por pelito. Y sí pueden ser depiladas todas las personas, morenas o rubias, porque el equipo permite graduar la frecuencia de la máquina de acuerdo a las características de cada paciente”, señala Verónica Quintero, representante en Chile de
Inspira, un centro de medicina integral traído desde Colombia.
Quintero asegura que esta modalidad es indolora y que incluso algunas clientas se han quedado dormidas mientras se trabaja en sus piernas. En cuanto al rebaje, comenta que en el país, si bien lo más normal es dejar una forma de triángulo, “la tendencia es quitarse más. E incluso no falta el que la quiere un corazón o una estrella”.
Aquí, las sesiones, en promedio, son 6 y se le agregan 2 adicionales para repasar la zona trabajada. El precio aproximado es de 390 mil pesos y garantiza entre el 90 y 95% de efectividad.
Y para las que no quieren pasar por largas esperas de depilado, el láser de
alexandrita parece ser la mejor opción, ya que tiene un haz de disparo mayor, como cuenta Paulo De Castro, gerente comercial del centro tecnológico de estética
Bioláser, donde las sesiones, en general, son 6 y el precio del rebaje varía entre los $120 mil y los $300 mil.
“Ahora, todos los equipos pueden manchar, depende si la persona está o no tomando algunos medicamentos (...) Lo más importante es rasurar antes la zona, porque, como generalmente ahí el vello es muy grueso y pigmentado, va a generar una gran temperatura sobre la piel y quemar”, señala.
Otros cuidados que se deben tener es no exponer al láser lunares ni tatuajes. En el caso de estos últimos, podría quedar una cicatriz. Además, a las embarazadas se les recomienda abstenerse.
“Nosotros no atendemos a mujeres con más de 6 meses de embarazo. Ya que el feto, al ver esta luz tan fuerte como la del láser, puede moverse, generando contracciones prematuras”, comenta Rivera.