Algunos productos para combatirlas |
- Nivea acaba de lanzar una línea facial de aclarado natural, que incluye un concentrado con ácido dioico y vitamina C, una crema de día y otra de noche. |
Pero, ¿qué las causa? "No se sabe bien (...) Se han hecho varias investigaciones y lo único claro es que es multifactorial, es decir, no sólo una cosa las produce", sostiene Carla Muñoz. Primero parten como pequeñas manchas que se van uniendo, para al final convertirse en una gran placa pigmentada, la cual habitualmente afecta el área del centro del rostro: la frente, la nariz, la barbilla y la zona del medio de las mejillas.
Según la dermatóloga, existen diversos mitos relacionados con los melasmas. Uno bastante común es el que dice que "aplicar limón sobre ellos los reduce". Y a veces no sólo se piensa que el limón puede ser la solución, sino que también se dice que el matico, el aloe vera y hasta el cloro los disminuye. "Falso. Puede empeorar incluso, porque todos estos elementos generan inflamación, sobre todo el cloro que inflama, irrita y en una piel con tendencia a pigmentarse ahí la mancha si que es difícil de eliminar", explica la dermatóloga. Además -agrega la especialista-, el limón y otras plantas tienen solarenos, que son unos productos químicos inherentes en ellos, que en contacto con la radiación ultravioleta, manchan. "Muchas veces pasa que gente que va al Caribe y toma muchos licores que van asociados al limón, queda con las manos manchadas y es porque se les derrama la bebida", ejemplifica.
Asimismo, suele afirmarse que "los tratamientos contra las manchas sólo deben usarse de noche". "No es así", sentencia Carla Muñoz, y explica que hay algunos productos que sólo pueden aplicarse por la noche, ya que son más potentes, mientras que los de día son menos agresivos. Sin embargo, sostiene que la clave son los tratamientos combinados."¿Qué saco yo con mejorar durante la noche y al día siguiente no me pongo nada? Entonces el sol hace de las suyas con todo lo que avancé, y doy un paso hacia atrás y tres hacia adelante", afirma. De esta manera, las cremas de día sí o sí deben ir asociadas a fotoprotección.
Otra creencia frecuente es que "los tratamientos sólo deben hacerse en invierno porque o si no manchan más". La dermatóloga sostiene que hay cierta verdad en esta afirmación, y explica que lo ideal es que los tratamientos de mantención se hagan durante el verano, mientras que los más potentes en los meses de menos sol. "Si son muy agresivos, la verdad pueden mantener la inflamación durante el día y ahí sí podrían manchar. Entonces, los tratamientos agresivos lo ideal es (realizarlos) en invierno", indica. Por esta razón -señala la especialista-, por lo general los tratamientos se inician en la temporada invernal, y cuando la piel ya se ha acostumbrado, es posible continuarlos durante el verano. Sin embargo, añade que quienes son fanáticos de la nieve deben tener precaución, ya que en la alta montaña también hay mucha radiación solar, por lo que si se están tratando las manchas, la fotoprotección debe ser exhaustiva.
También es habitual escuchar que si lo que se pretende es evitar la aparición de manchas, "sólo es necesario usar protector solar cuando se está al aire libre". "Falso, terriblemente falso", enfatiza la dermatóloga, y añade que siempre hay que usarlo. "La radiación solar produce cáncer, pero hay otros tipos de radiación que producen activación del pigmento: la pantalla del computador, los tubos fluorescentes, la pantalla del televisor, etc.", explica. De esta manera, la especialista recomienda que si lo que se desea es evitar el cáncer de piel, no es necesario ponerse protector solar dentro de los espacios cerrados. Sin embargo, si lo que se quiere es evitar las manchas, sí hay que hacerlo.
Tratamientos: La clave es la combinación |
Existen muchas sustancias que blanquean la piel, como el ácido dioico, el arbutín, el ácido azelaico y el ácido kójico, entre otros. Sin embargo, la “gold standard”, es decir, aquella con la que se comparan los otros productos, es la hidroquinona. “Es un muy buen despigmentante, pero al ser tan bueno, puede producir cierta inflamación y puede dejar más pigmentación en forma secundaria”, explica Carla Muñoz. |