Pachamama, Atenea, Afrodita, Démeter, Tara, Kuan Yin, Yemayá, Gaia, Kali, Lilith e Inana son algunos de las diosas que han sido reunidas en “El oráculo de las Diosas” de Silvia Selowsky, que editado el 2004 hoy es el preferido para conectarse con la energía femenina.
Es que las diosas seleccionadas parecen ser espejos de cómo somos las mujeres más allá de lo común, lo obvio, lo permitido.
“Ellas nos aportan belleza, danza, emoción, libertad, inteligencia, sexualidad, expresión artística, sanación y tantas otras cualidades de la energía femenina, que acostumbramos a sepultar por mandatos culturales castradores de nuestro potencial”, escribe la periodista Delia Vergara en el prólogo del libro.
Lo interesante es que las 28 deidades están reunidas en cartas o naipes, que funcionan como oráculo. Y como nadie nace sabiendo, su historia, mitología, tendencias y las características psicológicas de cada una de ellas está escrito en un didáctico texto, que además, entrega sugerencias, meditaciones, imágenes, frases talismán e invocaciones para cada deidad.
Están de vuelta porque es una de las herramientas más usadas en talleres, terapias y coaching ya que ayudan a desencadenar procesos de auto descubrimiento, porque según explica Silvia Selowsky, las mujeres logran tomar conciencia que estas presencias poderosas también habitan en ellas.
No es para menos, su creadora las clasificó en vírgenes e incorruptas, alquímicas, de la compasión, de las sombras, de gran fortaleza personal, sanadoras, vulnerables y emocionales y, de la buena suerte.
¿A qué grupo perteneces?
Las imágenes simbólicas de las cartas fueron creadas por la artista chilena Ana Taulis. Son retratos de 28 mujeres que sirven para que uno interactúe con ellas y conozca que, aquello que se siente tiene un origen místico. Aunque también está pensado para que los hombres conozcan su aspecto femenino.
“La idea es que las puedas invocar e incorporarlas como presencias reales, sagradas y poderosas en tu vidas”, comenta su autora.
Selowsky es periodista con estudios en psicología y diversas técnicas de sanación y autoconocimiento. Lleva 25 años entregando terapias, lecturas de símbolos y realizando investigaciones en las tradiciones místicas y ancestrales.
Para ella, “El oráculo de las Diosas” más que ser un mazo adivinatorio es una instrumento que quiere despertar el protagonismo de lo femenino en la sociedad.
“El propósito es facilitar la autoexploración interior aceptando que la conexión con el centro del ser, el viaje hacia lo esencial se realiza desde muchas facetas, espacios, arquetipos y espejos, variados y verdaderos, de distintas cosmovisiones que cohabitan el planeta desde tiempos inmemoriales”, escribe.
Los arquetipos femeninos
Por tanto, el énfasis está puesto en la cultura matrística, en la energía femenina y el reconocimiento de las infinitas posibilidades de ser mujer, rompiendo la idealización masculina y los tabúes.
“Nos permite salir de la limitación del modelo único de ser mujer y reconocernos como portadoras de energías múltiples, creadoras, fuertes, multicolores. Al leer sobre las diosas se produce un enriquecimiento inmediato de nuestra psiquis”, detalla Delia Vergara.
De ahí la importancia del conocimiento de los símbolos y las imágenes arquetípicas de las diferentes culturas para hacerlas propia en el presente. Además, al ser un oráculo, significa que podemos averiguar, por ejemplo, la energía de la diosa que se necesita para enfrentar tal o cual situación y tomar ese sentido. O, averiguar qué deidad se relaciona con mi nombre, con mi apodo. Puedo también, preguntar sobre cómo me ven los demás, la pareja, qué debo trabajar o mejorar en mi y que deidad me acompaña en esa tarea. Las posibilidades son amplias.
“Los oráculos manifiestan la necesidad y el interés del ser humano por conectarse con la divinidad, recibir sus mensajes e integrarlos a la vida del día a día. Las palabras orar y oráculo tienen un mismo principio que, es una manera de dirigirse a la divinidad”, detalla la autora.
Las 28 diosas
“La sabiduría y voluntad de una mujer no terminan nunca. La mujer puede sobrepasar cualquier obstáculo que encuentre en su camino. Llámame cuando te sientas sin poder o baja de energía. Yo te restauraré tu fuerza y fortaleza”, es una de las plegarias que se publica para invocar a Isis cuando aparece en una tirada. En cada una de las diosas aparecerá algo similar para realizar un ritual donde se visualiza e invoca esa energía, previo estará el significado de esta carta.
Sin embargo, si uno quiere partir por conocer la diosa que porta su nombre no es necesario tener el mazo. Silvia Selowsky entrega la oportunidad en su web http://eloraculodelasdiosas.blogspot.com de ingresar a este “ Juego de las Diosas”, donde una tabla indica la correspondencia numérica del abecedario.
La idea es sumar las letras de su nombre o apelativo y si el resultado es superior a 28 se vuelve a sumar esos dos números. ¿Qué diosa eres tú?
Clasificación de las Diosas
- Primigenia (Gran creadora que surge del caos y las aguas primordiales): Gaia
- Vírgenes e Incorruptas (Aman su libertad y no se dejan influir por los otros. Son artistas, innovadoras, independientes): Artemisa, Atenea y Vesta.
- Vulnerables y Emocionales (Dependientes. Sus sentimientos y acción están muy influida por sus cercanos. Emotivas, corresponden principalmente a las esposas, madres e hijas: Hera, Démeter y Perséfone
- Alquímica (Transformadora de su energía. Representa la madurez, conciencia y actúa con amor por su quehacer): Afrodita
- Gran Fortaleza Personal (Creadoras, fuertes y de gran capacidad de realización y contención. Influyen en su entorno): Isis, Freya, Pachamama, Hilandera, Oya, Coatlicue, Amaterasu.
- Sanación (Son inspiradoras relacionadas con el agua y con el fuego. Están conectadas con emociones más sutiles. Ayudan en el contacto con el amor y las energías más invisibles): Birgit, Flora, Yemanyá, Oshún
- De la Sombra (Son la parte de cada una que cuesta ver y asumir. La ira, el resentimiento, el caos. Cuando sale a la luz, ayuda a desarrollar mucha fuerza, energía y transmutación): Hécate, Inana, Lilith Kali, Sekhmet, Pelé
- De la Compasión (Generosas, meditativas, sanadoras. Enseñan la meditación, la misericordia y la bondad): Kuan Yin y Tara
- Buena Suerte (Del panteón hindú representa la deidad de la fortuna personal, la dicha en el plano espiritual y en la tierra): Lakshmi.