Los matrimonios forzados de niñas en el mundo islámico e hindú han sido denunciados y diversas ONG han reclamado acciones concretas para impedirlos.
Sin embargo, ello no los ha detenido y las consecuencias hoy se muestran trágicas: una pequeña niña yemení de sólo 8 años falleció en zona tribal de Hardh al noroeste del país, luego de que sufriera lesiones internas tras la relación sexual sostenida con su marido.
La información fue dada a conocer por la versión británica de The Huffington Post, que señaló que la pequeña Rawan sufrió desgarros de sus genitales y lesiones uterinas.
Hace algunas semanas
una ONG Karma Nirvana propuso que las pequeñas que eran enviadas a sus países de origen desde Inglaterra debían colocarse una cuchara entre su ropa interior con el objeto de que cuando pasen por el detector de metales puedan ser descubiertas y ayudadas.
La historia de Rawan fue develada por el diario Al Watan que señala que el marido de la pequeña tiene 40 años.
Tras conocerse el caso, las blogueras enfocadas en esta causa, sostuvo que el marido era un animal que debía ser castigado por su crimen, pero nada augura que el gobierno de Yemen vaya a tomar cartas en el asunto.
Entre 2011 y 2020, más de 140 millones de niñas se convertirán en niñas-novias, según el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA). La Organización Mundial de la Salud (OMS), calcula que cada día se casan 39.000 niñas menores de 18 años.
