No hay que sorprenderse tanto. Los matrimonios arreglados existen y hasta hay mucha gente que se casa por interés, pero ¿es posible fingir que uno se casa para tener una foto vestida de novia? ¿Cuál es el límite?
Parece que no existe y menos en la cultura japonesa donde la realidad con la fantasía a menudo se confunden.
Es que mantenerse en un estado más realista y por cierto, acorde con lo que se vive y elige, parece estar pasado de moda y la tendencia mundial es que ya no haya nada prohibitivo cuando el deseo por experimentar es más fuerte.
Aunque tampoco se trata de ser tan serios, graves ni cerrarse a la aventura. ¡La vida es una sola! Dicen.
Y bueno, menos ahora, que cuando hasta para casarse y aunque sea una mentira, ya no se necesitan hombres.
Esa idea y la sensación de poder tenerlo “todo” fue la que llevó a una empresa japonesa de viajes, a ofrecer el servicio que llamaron, “Solo Wedding”, o “Bodas en solitario”, especiales para aquellas mujeres que desesperadamente andan con el “vestido de novia en la cartera” y no tienen por dónde llegar al altar.
Es un viaje
El servicio está destinado a mujeres solteras, independientes y con un buen nivel de ingresos que quieren cumplir este “sueño”.
La compañía que inventó este “viaje”, ofrece un verdadero paquete turístico de dos días, que incluye la elección del vestido, ramo, peinado y maquillaje. E incluso, se puede elegir a un modelo que las acompañe en la sesión de fotos que registra el gran y esperado momento.
“Ten todo el brillo y la pompa de una boda, pero sin el compromiso”, es la frase con que Cera Travel, con sede en Kyoto, promueve el innovador servicio, que también busca incorporar a mujeres divorciadas que quieren sentirse nuevamente especiales.
Y como si no fuera suficiente, el “viaje” contempla una noche en la suite matrimonial del lujoso hotel donde se lleva a cabo todo el “sueño”, pero claro, sin el hombre de la foto. La idea es que la “novia” disfrute sola o en compañía de un novio de la noche de “luna de miel”, pero sin el compromiso real de un matrimonio.
Sin maridosSin duda, esta nueva tendencia del lejano oriente que partió en junio de este año, está poniendo de manifiesto el “happy end” con que “toda” mujer sueña, es una experiencia más y que nadie debiera perderse aún estando soltera.
Pero, ¿vale la pena? Por diversión y gozar el glamour de un día, todo indica sí. Es que las mujeres, argumentan en la compañía japonesa, se han vuelto trabajólicas y no tienen tiempo para seguir con las tradiciones, ya que sólo estarían apostando su tiempo y dedicación a sus carreras profesionales.
“Es una experiencia única y que estamos muy orgullosos de poder ofrecerla. Todos los detalles son atendidos por profesionales y para aquellas que no quieren un vestido tradicional, tenemos un servicio de Geisha, para que puedan usar esos atuendos en las fotos”, comentaron en una nota publicada en el New York Post.
Hasta el momento diez mujeres han aceptado la oferta, que cuesta alrededor de 2,700 dólares. Una de ellas, fue la empresaria Nagi Daisen, de 43 años, quien a pesar de tener una relación por años nunca se ha casado.
“Así que me decidí a hacer esto por mí misma y fue increíble y divertido. Siempre quise usar un vestido de novia, que te mimen y fue genial”, aseguró.
La idea de “bodas en solitario” o “consigo mismas” no es nueva. Hace un par de años, Nadine Schweigert,
una mujer norteamericana se casó con ella misma e intercambió los anillos con su “esposo interno”. El compromiso, fue una manera de dejar la vida autodestructiva que había llevado por años.