¿No quedas embarazada? Las señales que indican problemas de fertilidad

Cerca de 250 mil parejas en edad reproductiva, es decir, un 14% de chilenos, tienen problemas de fertilidad. Sin embargo, se estima que un 92% podría resolver esos conflictos con tratamientos no muy complejos, según cifras del año pasado.

El número no es menor, por lo que no parece menos importante conocer algunos signos que, desde temprano, podrían dar señales de que en un futuro, y cuando se quiera concebir un hijo, se pueda tener problemas de infertilidad cuyas "causas pueden radicar en el hombre (30%), en la mujer (30%) o en ambos incluso. En algunos casos, la causa puede llegar a ser inexplicable", explica el director de Clínica IVI y de la Sociedad Chilena de Infertilidad, Carlos Troncoso.

Partiendo con una información primordial, se entiende como infertilidad la incapacidad de una pareja para lograr un embarazo, después de un año de relaciones sin utilizar algún método anticonceptivo. Pero antes de llegar hasta ese punto, son muchas las personas que pueden poner atención a las pistas que su propio cuerpo les da en su desarrollo, y que podrían estar evidenciando un problema para concebir.

Por ejemplo, las mujeres suelen sufrir de dolores, tanto en sus períodos menstruales como durante las relaciones sexuales. Y tal como señala Troncoso, esto se asocia con la endometrosis (cuando el tejido que se encuentra en las paredes del útero crece afuera de éste).

Sin duda, el período menstrual es clave para dar pistas sobre problemas de infertilidad, sobre todo si éste evidencia el impedimento de liberar un óvulo maduro de los ovarios, y que se podría revelar a través de la misma ausencia del período o que éste sea poco frecuente, que tenga un sangrado leve o abundante. En resumidas cuentas, que la regla no sea considerada como "normal".

Asimismo, el acné, la obesidad y el exceso de vello en ellas, podría traducirse como posibles síntomas de ovario poliquístico, que produce "desequilibrios hormonales y patrones de ovulación impredecibles", comenta Troncoso.

De igual forma, el doctor agrega como posibles factores de infertilidad "cirugías pélvicas o ginecológicas, infecciones ginecológicas, tratamientos como la quimio y radioterapia", y los antecedentes familiares que tengan presentes la menopausia precoz.

En cuanto a la creencia de que tomar por muchos años pastillas anticonceptivas podría perjudicar la fertilidad, Troncoso es enfático al asegurar que se trata de un mito. "Los anticonceptivos no afectan la fertilidad. Sí puede pasar que el uso de anticonceptivos haya ocultado cuadros de anovulación u oligomenorrea (falta de ovulación u ovulación irregular), dismenorrea severa (dolor pélvico menstrual sugerente de endometriosis); cuadros que una vez que se suspendan las pastillas se expresan, y recién entonces se hace el diagnóstico".

Menos vello y cambios de voz en hombres: alertas de baja en testosterona

Aunque no es una regla, la caída del vello y el cambio de voz en los hombres, podrían ser señales de hipogonadismo, "una disfunción testicular, relacionada con los bajos niveles de testosterona (la principal hormona sexual masculina)", y que se asocia con el 9% de los casos de infertilidad en ellos, explica Troncoso.

También en los hombres, el dolor en los testículos podría ser un signo de infertilidad, si las molestias son producidas por várices. "La varicocele (o dilatación de las venas del cordón espermático) es una anomalía que consiste en la presencia de várices en las venas que drenan la sangre de los testículos, que se dilatan", señala el experto sobre este mal que causa un 15,6% de problemas de fertilidad masculina.

Preparando el cuerpo para la concepción

Mantener un peso saludable es trascendental si se quiere lograr un embarazo. Por ejemplo, se espera que el índice de masa corporal sea entre 20 y 25 kg/m2, ya que, de pasarse estas cifras, el embarazo podría ser riesgoso. Además, según las recomendaciones médicas, aquellas que superan los 35kg/m2 no deberían ni siquiera intentar embarazarse.

Por otro lado, el cigarrillo y el alcohol quedan prohibidos entre los hábitos de una mujer que desea un embarazo. El primero, debido a que el tabaco posee más de dos mil sustancias tóxicas y podría alterar la división del embrión en un comienzo, aumentando las probabilidades de abortos y malformaciones. En cuanto a los hombres, se cree que el tabaco reduce la calidad de sus espermatozoides.

En tanto, si se abusa del alcohol, desconociéndose un embarazo, podría desencadenar lo que se conoce como Síndrome Alcohólico Fetal, con el que un niño podría nacer con bajo peso, deprimido, con alteraciones craneofaciales y con retraso del desarrollo psicomotor o retraso mental grave.

Por último, otro producto común en la alimentación de las personas y que se debería disminuir en consumo, es la cafeína, ya que en dosis elevadas parece bajar la capacidad fecundante, tanto de hombres como de mujeres. Por esto, se recomienda un máximo de dos tazas al día.

Y aquellas mujeres que ya se han preparado para un embarazo ya sabrán que consumir ácido fólico desde un mes antes que se produzca la concepción, beneficia el desarrollo del embrión, en cuanto al cierre del tubo neuronal.

Asimismo, es importantísimo olvidarse del estrés. Si bien, muchas veces, el mismo hecho de no poder embarazarse provoca ansiedad, es necesario calmar los ánimos, ya que este mismo estado anímico podría ser contraproducente.

"Tradicionalmente, el estrés ha sido cuestionado como una causa real de infertilidad, y se cree que en niveles muy altos puede tener cierta repercusión en funciones endocrinas e inmunológicas, tanto para el hombre como para la mujer. Es por ello que actualmente, se aconseja que toda pareja tenga apoyo psicológico durante su tratamiento, ya que se logra un mejor manejo de las expectativas y un menor abandono en los tratamientos”, explica Troncoso.