Terminadas las guerras napoleónicas (1799-1815), cuando Francia se sumergía en la derrota, el 2 de julio de 1816 la fragata francesa "La Medusa" encayó frente a las costas de Senegal. La causa fue la ineptitud y negligencia de su capitán, quien huyó dejando a 149 personas a la deriva, de las cuales sólo sobrevivieron quince que debieron recurrir al canibalismo, tras trece días en una improvisada balsa. Sin duda resultó ser un evento escandaloso y de importantes repercusiones políticas.