Turner pintó "Giudecca, La Donna della Salutte y San Giorgio" en Londres, al regreso de su última visita a Venecia en 1841.
El cuadro muestra el canal de la Giudecca con San Giorgio en el centro, la Madonna della Salute a la izquierda y la iglesia de Zitelle a la derecha. Esta parte occidental del canal obsesionaba al pintor y le inspiró un gran número de bosquejos a lápiz y más tarde, una serie de 150 acuarelas.
Esta obra se caracteriza por el uso de empaste para captar la trémula luz veneciana sobre los edificios, el agua y las nubes. Al mismo tiempo, a través de delicadas pinceladas y rasguños, Turner logra destacar pequeños pero importantes detalles como los de la Zitelle y los gondoleros.