En 1540, Benvenuto Cellini se trasladó desde Roma a Fontainbleau (Francia) para trabajar al servicio del rey Francisco I (1494-1547). Fue entonces cuando creó su famoso "Saliera". Fabricado en oro, plata y esmalte, el salero representa a Poseidón y Anfitrite. Según la leyenda, Poseidón (dios del mar y de los océanos para los griegos) vio un día a la ninfa del mar Anfitrite bailando en la isla de Naxos y se enamoró perdidamente de ella. Asustada por la fama de mal genio del dios, quien era capaz de causar grandes tormentas y terremotos y hasta de separar montañas y tirarlas al mar para formar islas, ella lo rechazó.
En lugar de desalentarse, Poseidón pidió a un delfín que abogara por él. El delfín tuvo éxito y en recompensa, Poseidón colocó su imagen entre las estrellas como la constelación Dolphinus. En medio de un solemne cortejo de animales y divinidades marinas, el dios y la ninfa contrajeron matrimonio y juntos gobernaron los mares. Ésta es la historia tras los personajes representados por Cellini en esta reconocida obra, lamentablemente, su único artículo de orfebrería que se conserva. Excelencia y perfección lo convierten, sin duda, en uno de los más importantes ejemplos de la muy refinada técnica italiana del Manierismo.