" El volantín es sin lugar a dudas un ícono de las fiestas patrias."
l volantín es sin lugar a dudas un ícono de las fiestas patrias. Aunque su aparición en el mundo se localiza en China, cerca del 200 A.C., en Chile recién fue conocido con la llegada de los españoles, haciéndose popular a mediados del siglo XVIII.
El volantín no es más que un trozo cuadrado de papel, con una liviana armazón de palos de coligüe, que es elevado a través de un simple hilo. Se puede jugar simplemente elevándolo lo más alto posible, o bien, a través de la "comisión" que consiste en mandar "cortado" el volantín del contrincante, lo que se consigue a través del roce entre los hilos.
Este tipo de competencia está ampliamente extendida en el territorio nacional y se realiza tanto por asociaciones profesionales, como por amateurs, quienes muchas veces emplean el peligroso "hilo curado", que es una mezcla de cola y vidrio molido.
Para enrollar el hilo empleado para elevar los volantines se utiliza un carrete, llamado antiguamente "roldana". Para facilitar el envolver y desenvolver se utiliza un palo o caña.
Los volantines se clasifican de acuerdo a su tamaño y forma. Los de menor tamaño son conocidos como "ñeclas" (aunque los hechos con papel de diario reciben el mismo nombre), los que no tienen cola son llamados "volantín chupete", mientras que los más grandes se conocen como "pavos" o "jotes".