Las casi cuatro décadas de trayectoria de este británico lo consolidan como uno de los cinematógrafos más respetados de la industria. Su experiencia en películas como “Sueños de fuga”, “Una mente brillante” o “El gran Lebowski” es reconocida en Hollywood, lo cual queda demostrado con las diez nominaciones que La Academia le ha cedido. A dos años de perder el trofeo con “Temple de acero”, de los hermanos Coen, el inglés viene ahora por su revancha.