"La derecha va a ganar por culpa de la Concertación" Reportajes, 22 de abril de 2001. Por RAQUEL CORREA Cambia, todo cambia, pero ella no. Su discurso es el mismo. Contra la derecha, contra el imperialismo, contra la injusticia. Incluso, contra el gobierno, demasiado liberal para su gusto. Ya no dice su edad como antes. "A esta altura hay que quitarse la edad y los kilos", comenta con un buen humor que no cuadra con el estereotipo del antiguo comunista. Pero es que Gladys Marín - con cincuenta y tantos años, dos hijos y tres nietos, ex diputada y ex candidata a la Presidencia de la República- se permite licencias. No sólo va al gimnasio tres veces a la semana, sino que a la peluquería con regularidad. Actuó interpretándose a sí misma unos minutos en una película que está en post producción ("Cienfuegos 583") y no se hace de rogar para vestirse y maquillarse como una modelo para revistas femeninas ni para chacotear con el "Cote" Correa en televisión. Muy delgada, bajita, con las polleras bien cortas, se ve sumamente frágil... hasta que empieza a hablar. Entonces aparece toda la pasión y la bravura de esta mujer que antes estuvo en la dirección de las JJ.CC. y ahora es la cabeza del PC chileno. Una mujer a la que todos los sectores respetan porque la encuentran consecuente, aunque la consideren muy equivocada. Sufrió el exilio, la desaparición de su marido - "mi compañero, el ingeniero Jorge Muñoz", repite siempre que habla de él- y los doce años de vida clandestina en Chile. Para volver, en pleno gobierno militar, cambió su fisonomía: "Me corté el pelo, me puse un montón de rellenos por aquí y por acá para verme gorda, y hasta una dentadura que me inflaba las mejillas", refiere recordando las tres veces que entró a Chile con otras identidades. Lo más difícil para ella fue imitar maneras de hablar extranjeras para concordar con sus pasaportes, falsos por supuesto. Fue la época en que no se atrevía a acercarse a sus hijos que se criaron con los abuelos. Rodrigo, médico, y Alvaro, profesor de Educación Física, ya la han hecho abuela, estatus que no le ha restado nada de fogosidad. Vive en los cerros, en Santa Sofía de Lo Cañas, en su propia casa. - ¿Sola o acompañada? “Ehhhhh. Ahora sola, pero con mi hermana Nancy. Yo he tenido pareja estos últimos años, con encuentros y desencuentros. Ahora estoy en una etapa de reencuentro - y se ríe con ganas”. De origen campesino, nacida en Curepto, se las arregla perfectamente con 500 y tantos mil pesos mensuales que recibe como jubilación por sus seis años de profesora normalista y sus períodos de diputada, del 65 al 73. Y como el dinero le importa poco, el que le daban como reparación por la muerte de su marido se lo cedió a su hijo menor. - ¿Y el partido no le da nada? (Se ríe.) “No. A veces yo le tengo que dar al partido. Me muevo en las mismas cosas: lo social, lo político, tengo "pega" de sobra. Difícilmente alguien puede dimensionar lo que es dirigir un partido, sobre todo uno como éste”. - ¿Un partido marginal? “Marginal, no. No estamos marginados de la gente, de los jóvenes, de las mujeres. Excluidos del sistema político, sí, en un tiempo donde la política se hace con tanta plata”. - Y ahora ya no les llega de afuera... “Nada, pues. De ninguna parte. Si todavía no nos han devuelto los bienes. Recién ahora van a empezar a devolver la primera cuota de los bienes que están reconocidos, después de once años de Concertación”. - ¿Cómo se explica eso? “Como una inconsecuencia total de la Concertación, que no ha cumplido con ese compromiso. Y, también, de parte de la derecha que tendría que votar a favor de algo que tanto tiene que ver con la derecha: la defensa de la propiedad privada. ¡Si lo que nos robaron era nuestro! Ya existe la ley, pero hay una y mil tramitaciones. El primer responsable es la Concertación y está la obstrucción permanente de la derecha”. Oyéndola hablar en la sede de la Asamblea de la Izquierda (alero de grupos étnicos, de la "diversidad sexual" - eufemismo que usa para referirse a homosexuales y lesbianas- y de varios grupos de izquierda-izquierda incluido el MIR, de cristianos y hasta pastores evangélicos, según asegura ella), queda claro que se siente casi tan lejos del actual gobierno como de la Alianza por Chile. Y eso que los votos de su gente dieron el triunfo a Lagos en la segunda vuelta. LA TRANSICIÓN ALARGADA - ¿No cree que están estirando demasiado la cuerda, que esta impaciencia podría arriesgar la democracia que tenemos? “Lo que pasa es que se está alargando demasiado esta famosa transición a la democracia y nunca se realiza. El Chile de hoy, en todo lo fundamental, es el país que imaginó el que estructuró la dictadura. Aquí está realizándose el objetivo del gobierno militar. En primer lugar, un sistema económico neoliberal a ultranza, sin ninguna participación social. Medidas muy rígidas y dogmáticas a favor de los grandes grupos económicos nacionales e internacionales. Y el gobierno administra las políticas de los grandes organismos financieros”. Abre los brazos en cruz y fija los ojos remarcados con lápiz negro: “Este es el Chile de hoy. ¿Qué cambio ha existido? ¡Sólo en lo formal! En la realidad no hay cambios. En Chile no hay una democracia. Si partimos por la Constitución que nos rige, por el sistema binominal, ¡todo es absolutamente funcional al modelo económico! ¡Todo! Si no existiera este sistema binominal, las medidas económicas que han tomado ¡no se resisten! ¡Estaría la protesta más descomunal!” - Usted ha dicho que en Cuba hay democracia... “Claro”. - ¿Qué le pareció la condena de ONU a Cuba...? “La repetición de un tinglado que monta Estados Unidos a través de los organismos de ONU que se mueven por el interés de las grandes potencias. ¿Cómo se explica la resistencia de Cuba después del bloqueo, las intervenciones, las agresiones financiadas desde Estados Unidos?” - Harta pobreza. “Relativa. Hay necesidades, pero todo el mundo tiene salud gratuita, educación gratis. Y esos son derechos elementales. A pesar de todo, Cuba ha crecido en un 4% sostenido en los últimos años y con grandes perspectivas. Pero la causa fundamental de los problemas de Cuba es el bloqueo norteamericano”. - ¿No será Fidel...? “No. Porque, ¿quién puede acusar a Cuba de violación a los derechos humanos? No hay detenidos desaparecidos, ni ejecutados políticos, ni torturados, ni degollados. ¡Por favor!, ¿de qué la están acusando? Aquí salen a la calle los policías con escafandras para reprimir cualquier manifestación. En Chile, en los primeros meses de este año tenemos, sin contar los del pase escolar, ¡más de mil detenidos en las calles! Si la gente no puede protestar”. - ¿Y en Cuba sí puede protestar? “En Cuba la gente participa muy directamente. Es que la democracia cubana no se puede medir con el mismo parámetro de la democracia de cualquier otra parte. En Chile no tenemos democracia, no tenemos Parlamento representativo, los partidos políticos no son representativos”... - ¿Y en cuanto a las libertades individuales...? “Usted ve, Chile ha sido cuestionado por organismos internacionales por la libertad de expresión. Porque en un país donde hay concentración de los medios de comunicación en muy pocas manos, no puede haber libertad de expresión. ¡Muy limitada! El problema es el modelo económico que tiene expresión en lo político, lo social, en las libertades. La gente no puede participar. Aquí, en la Asamblea de la Izquierda el Partido Comunista es parte de la izquierda alternativa. Ahora se incorporó un movimiento de izquierda socialista. ¡Mucha gente!” Prosigue: “¿Cómo no vamos a cuestionar el sistema binominal que lleva a una sobrerrepresentación de la derecha? Y los actuales parlamentarios son elegidos ¡antes! de la elección popular, por sus propios partidos, ¿para qué andamos con cuentos? Entonces, ¿de qué democracia me está hablando? Más de tres millones de jóvenes no se inscriben en los registros electorales. Y entre las abstenciones, los votos nulos y blancos, tenemos sobre el 25%. ¡Vamos sumando!” Se entusiasma: “¿Ha escuchado ese chiste que dice que van caminando un trabajador de la construcción con un portuario de Valparaíso frente a la sede del Congreso y escuchan: "¡Ladrón, corrupto, sinvergüenza, ignorante, figurete!". Y uno le dice al otro: "¿Oyes cómo discuten? Y el otro le contesta: "No, si están pasando lista". CRECIMIENTO DE LA DERECHA Al momento de hacer un análisis de actualidad política, afirma: “Hay una derecha que está creciendo muy fuerte. Un crecimiento que ha seguido aumentando después del 99”. - El 99 usted fue la gran derrotada. “No. Porque nunca tuvimos expectativas muy altas”. - Pero estuvo bastante bajo las expectativas. “Fue una elección que nos mostró la cara de esta democracia chilena. Presentando a un Chile en blanco y negro: o derecha o Concertación y manipulando el temor en la gente. Y otro cuento, el del voto útil. Por eso las elecciones son tan deformadas. Cantidad de gente que simpatizaba con nosotros tuvo temor a que ganara Lavín y votó por la Concertación. La Concertación tiene la culpa del crecimiento de la derecha. ¡Su responsabilidad! Se la dieron en bandeja. Está realizando todas las políticas que impone la derecha. La derecha económica está realizando con la mano de la Concertación todo lo que quiere. “La Concertación - resume- se ha olvidado ¡absolutamente! de todo su programa y no tiene ninguna voluntad de cambios democráticos”. - ¿Lagos tampoco? “Lagos hizo muchas promesas. La gente tuvo muchas esperanzas. Se lo dijimos cuando asumió y le dijimos que teníamos grandes aprensiones. Que si no hacía cambios de fondo en lo económico y en lo político iba a seguir el país en un carril de absoluto estancamiento social. “Si usted revisa ¡todas las promesas de Lagos! no hay ninguna que haya cumplido”. Y a renglón seguido se pregunta y contesta ella misma: “¿Me van a decir que sacó el seguro de cesantía? ¡Bueno! El seguro de cesantía es ¡absolutamente in-su-fi-ciente! por decir lo menos. Trescientos y tantos mil pesos que se pagarán en cinco meses; corre a contar del 2003, y ¿qué pasa con los cesantes de hoy que se mueren de hambre? Un seguro de cesantía para tener carácter de tal debería ser ¡retroactivo!” - ¿De cuál de los ministros de Lagos se siente más cercana? “De ninguno... Otro cuento es que uno pueda tener simpatía personal por algunos. Por ejemplo, tengo mucha simpatía por la Carolina Tohá. También por la Michelle Bachelet: gran simpatía y respeto personal, pero no estoy de acuerdo con las políticas de salud. El Presidente dijo que se necesitaba una reforma "integral" de la salud, que todos tienen derecho a la salud. Y eso no ha ocurrido”. - Ahora van a anunciar la reforma. “Sí, pero una reforma que va hacia la ¡pri-va-tización! de la salud”. - ¿Y de cuál ministro se siente más distante? - Del ministro de Hacienda, por su política neoliberal. Los que dirigen el gabinete de Lagos son los ministros de Hacienda y Economía. Además le encuentro a Eyzaguirre un tono tan prepotente. "Yo - dice tratando de imitarlo- no quiero peleas. Yo...". Si hablan como patrones de fundo. Y el Presidente Lagos también habla en tono de sentencia. Decir "si al país le va bien, a todos nos va bien". ¿De dónde sacó eso el Presidente? Si al país le va bien, ¡a algunos les va bien; al resto le va muy mal! - Y José Miguel Insulza, ¿cómo le cae? - Voy a separar lo personal. Porque existe el recuerdo de los años vividos en conjunto. Éramos tan jóvenes y con tantos sueños... Yo sigo con los mismos sueños de entonces y él abandonó sus sueños. Es uno de los representantes más claros del viraje que ha hecho gente de la Concertación, como Enrique Correa, Garretón. Ahora están propiciando absolutamente lo contrario de lo que propiciaron como políticas para una sociedad justa. Hoy están al lado de los ¡empresarios! - ¿Cuál señalaría como el punto más negro del gobierno? - La cesantía. El drama de no tener trabajo. Cuando dicen 8,4% que significaría 500 mil cesantes, ¡falso! Hay un millón quinientas mil personas cesantes. Un drama humano terrible. Pero todo está dentro del sistema. - ¿Usted cree que la cesantía es culpa del gobierno o consecuencia de la crisis internacional? - Mi crítica es al gobierno que aplica estas políticas. Ya no les queda nada que privatizar. El libre mercado. Ese es el modelo económico que hoy está siendo cuestionado en el mundo. Es el modelo el que hay que cambiar. - Pero muchos analistas sostienen que los cambios - como la reforma laboral y tributaria- son antiempleo. - Falso. El proyecto de reforma laboral favorece a los empresarios. - No es eso lo que dicen los empresarios. Al contrario. - Es que los empresarios dicen lo contrario para exigir más. Me acuerdo muy bien la entrevista que le hizo a Ariztía hace unos domingos. La tengo subrayada entera. Dijo algunas cosas y al día siguiente el gobierno estaba mandando indicaciones al proyecto original para dejarlo a gusto de ellos. No es eso lo que crea desempleo. El tema es que el modelo neoliberal aplicado en Chile está fracasado. No da para más. Lo ha dicho el propio Presidente. Hay que industrializar el país con un papel muy activo del Estado. Porque, ¿quién va a tener un proyecto nacional de desarrollo? ¡El Estado, no los empresarios! Tenemos que salirnos de esta mecánica impuesta a nivel mundial y buscar una política distinta donde el ser humano sea el centro. - La reforma laboral propuesta es una aberración. Permite el reemplazo de trabajadores en huelga, impide la negociación interempresas, termina con la jornada laboral de ocho horas, y hasta con el feriado dominical, estableciendo un solo domingo obligatorio de descanso al mes. Algo siniestro. DERECHOS HUMANOS - En el balance del primer año, Lagos destacó la relación con las FF.AA., el juicio a Pinochet, los frutos de la "Mesa de Diálogo"... Gladys Marín interrumpe: - Claro. Se ha avanzado en el tema de los derechos humanos. Pero el gobierno no tiene derecho a apropiarse del tema de los derechos humanos. Esos avances se han hecho contra la derecha y también contra los deseos del gobierno. El gobierno no quería que Pinochet fuera procesado. Lo que hicimos al entablar la primera querella en su contra, acto que me correspondió ejecutar a mí, fue una afirmación de soberanía nacional. - ¿Pensó entonces en lo que vendría? - No. Fue un acto de verdadero valor. No se olvide que entonces Pinochet era comandante en jefe del Ejército e iba a asumir como senador vitalicio. ¡No podía ser! ¡Teníamos que reaccionar! Se ha avanzado en el tema de los derechos humanos porque ha habido un movimiento muy fuerte y una reacción internacional muy potente, que coloca a Pinochet y la dictadura militar en este país como símbolo de lo peor que haya pasado. - Que haya sido detenido en Londres, desaforado y procesado en Chile, ¿no es suficiente para ustedes? - Es muy importante que se persiga la justicia, sin cansarte. Hay que llevar las cosas hasta el final. Se cometieron delitos tremendos, crímenes contra la humanidad y Pinochet tiene que recibir el castigo. - O sea, no está por el perdón en caso alguno. - Yo creo que todos tenemos que poner la justicia en primer lugar y, una vez que opera la justicia, el perdón es un acto personal que nadie puede imponer. Si me pregunta si estoy dispuesta a perdonar yo le pregunto ¿a quién voy a perdonar? ¿Quién fue responsable? No voy a perdonar a Pinochet. Sería una mentira. Y por mucho que lo diga la Iglesia y repiquen todas las campanas, yo no voy a perdonar. Pero voy a convivir civilizadamente como lo hacíamos hasta el 73 distintas tendencias políticas y religiosas. Pero la justicia tiene que hacer su proceso. - Y eso es lo que está pasando. - Pero sólo se ha iniciado el procesamiento. No está ni fichado. - ¿No le da pena? - Nada. Porque si no se le juzga, ¿qué les enseñas a las nuevas generaciones, si el holocausto todavía está vivo? Nunca más en este país debe haber ningún degollado, ningún desaparecido, ningún ejecutado. Para salir adelante esta sociedad tiene que dejar que la justicia opere. Y vuelve sobre la "Mesa de Diálogo" con vehemencia: - Fue un camino equivocado el intento de colocar un punto final, de superar la labor que tenía que hacer la justicia. Y lo más grave es que el Presidente Lagos haya hecho una interpretación histórica absolutamente forzada que no corresponde a la realidad, cuando dice que hubo una espiral de violencia en Chile que llevó al golpe militar. - ¿Y no es cierto que hubo una espiral de violencia? - Falso. El golpe lo provocó Estados Unidos, como se ha reconocido en documentos oficiales de esa nación. No fue una espiral de violencia. Nada, nada de lo que ocurrió en Chile puede justificar el golpe militar. Y al final de cuentas, las conclusiones políticas de esa "Mesa" es una justificación del golpe militar. - ¿Está de acuerdo con la querella contra los comandantes en jefe actuales que presentó la abogada comunista Julia Urquieta, por obstrucción a la justicia? - Por supuesto. Justísima. La presentó a petición de los hijos de los detenidos desaparecidos. Ellos pertenecen a esas Fuerzas Armadas que dieron el golpe militar y que atropellaron los derechos humanos. Y está claro que las instituciones tienen toda la información de lo ocurrido. Tienen los antecedentes y mañana se va a demostrar que los tenían. Los tienen que entregar. Además, a través de la Mesa de Diálogo entregaron datos falsos. - A propósito de justicia, ¿qué le parece la nueva Suprema? - ¡Hasta por ahí, no más, la "nueva" Corte Suprema! Para integrar nuevos jueces tienen que ser uno y uno. Binominalismo también en la justicia. Otra gracia de la Concertación: el consenso. Nosotros logramos el desafuero de Pinochet , no el gobierno. La Concertación puede hacer leyes con la fuerza que tiene, pero no ha querido. ESTRATEGIA PARA LAS PARLAMENTARIAS Siendo tan crítica con la Concertación, ¿cómo se explica que haya pretendido aliarse con ella para las parlamentarias? - Se explica porque - como les dijimos el 97, cuando no tenían mayoría- si quieren cambios democráticos les proponemos un acuerdo parcial. Reformar la Constitución, reforma laboral y tributaria y derogar la Ley de Amnistía. La misma propuesta que les hicimos este año. Porque nosotros sí que somos una fuerza antiderechista. ¡No me vengan con cuentos! Nos dicen si ustedes presentan candidatos, van a favorecer a la derecha... ¿Desde cuándo? ¿Dónde la vieron? Todos tenemos derecho a optar... - Pero cada voto que se va a la izquierda extraparlamentaria es un voto menos para la Concertación. - Ah, ¿entonces tenemos que votar obligatoriamente por la Concertación? ¿Y si no estamos de acuerdo con sus políticas? ¿Y el derecho de las minorías, ah, para representar sus propias alternativas? Nuestra propuesta era formemos una minoría y démosle un golpe a la derecha. - ¿A qué sector responsabiliza del fracaso de esa propuesta? - Fundamentalmente a la Democracia Cristiana. Hormazábal fue muy claro. Si vienen los votos de la izquierda se les van los votos de la derecha. Ese es el drama de la Concertación. Y con los votos de la izquierda, ¡nuestros votos!, le habríamos ayudado a la Concertación a doblar a la derecha en 22 distritos a lo menos. Y también a doblar en tres regiones senatoriales. Pero eso no lo quisieron. - ¿Por qué usted, siendo la figura más popular de la izquierda, se niega a ser candidata a senadora? ¿Temor a una derrota? - Para nada. No estamos por ganar elecciones, sino para instalar ideas. Siento que puedo ayudar más moviéndome nacionalmente. - ¿Qué hará el PC si no obtiene los votos suficientes como para seguir existiendo legalmente? - Creo que vamos a tener los votos suficientes como para mantenernos como un partido legal: sobre el 5%, sin duda. De lo contrario, volveremos a recopilar firmas... - Entre sus candidatos presentarán dirigentes sindicales a sabiendas de que no pueden hacerlo, según la ley. ¿Por qué? ¿Una provocación? - Sí, una provocación. Para demostrar lo antidemocrático que es este sistema. Y representaremos esta situación injusta ante organismos internacionales. Este es un país hipócrita y mentiroso. - Entretanto, ¿cree que ya llegó el momento de las protestas callejeras? - Llegó hace tiempo. Lo menos que se puede hacer es protestar por la situación, contra esta transición. Es lo menos que podemos hacer: es un derecho. - Ayer estuvieron por la lucha armada, ¿hoy por los disturbios callejeros? - Cuando se está impedido hacer la lucha social y la lucha política no te queda ningún otro camino que las calles. Como lo hace la gente de Pudahuel que está reclamando por el vertedero, como los enfermos terminales, como en Quilicura o como en Ovalle. - Usted sabe en qué terminan esas protestas: muertos, heridos, destrozos... - En un país democrático no tendrían por qué terminar en eso. Pero en Chile quienes provocan las reacciones son carabineros con sus actitudes. ¡Es increíble! Yo he estado en la calle, uno no se mueve cuando ya empiezan a reprimirte. Está uno con un lienzo y empiezan a manotazos con el lienzo. Es la respuesta de un Estado policial, un Estado represivo. - ¿Eso es el Estado de Chile? - Sí - dice enfática- . Un Estado policial y represivo. Yo celebré la idea de Lagos de abrir La Moneda. Pero, ¿cuál es la realidad? Carabineros ro-deando La Moneda. Una Moneda constantemente rodeada de vallas o de carabineros. ¿En qué país del mundo ocurre esto? - ¿Qué participación reconoce al PC en la huelga de los estudiantes secundarios? - Tenemos absoluta simpatía y solidaridad con el movimiento de los estudiantes, como la mayoría de la población, puesto que o son estudiantes, o padres, o hermanos, o profesores de estudiantes. O somos ciudadanos que encontramos absolutamente justo su movimiento por el pase escolar gratuito. Por último, si la educación es un derecho, el Estado, el gobierno, tendría que facilitarles la movilización. - Sin embargo, los jóvenes estaban gritando "Lavín, entiende, el pueblo no se vende". - Ah, es que la movida de Lavín es otra cosa. Los secundarios son muy inteligentes, ellos están reclamando sus derechos. Pagaron el pase escolar el año pasado, los patudos de los empresarios microbuseros no se los entregaron y este año quieren que se los vuelvan a pagar. Una estafa. Segundo, piden que se establezca el pase gratuito, no la movilización gratis. Eso le corresponde hacerlo al Estado, no a las municipalidades. ¿Por qué los estudiantes se van a tener que entender con Lavín, para soluciones parciales, por grupos, para dividirlos? - ¿El PC ha estado infiltrando las manifestaciones? - Los estudiantes secundarios comunistas que han estado en la calle lo hacen legítimamente. Los estudiantes se manejan solitos. No necesitan ser dirigidos ni instrumentalizados. Están luchando por algo muy justo. - ¿Se siente más cerca de ACES que del Parlamento Juvenil? - ¡Por supuesto. - La ministra Aylwin dice que tienen una organización horizontal, que no respetan jerarquías... - Tienen una mentalidad tan militarista en este país. Quieren que todo sea tan ordenadito, poder entenderse con una sola persona. Pero los muchachos deciden en asam-bleas... - Pero como no tienen una sola voz, no hay con quién entenderse... - Entonces, que la ministra ponga más sillas, pues. La ministra tiene la obligación de escuchar directamente a los estudiantes. Y el Parlamento Juvenil no representa a la enseñanza media.