Tora
Bora
Alianza
exige rendición total a Al Qaeda
El
Mercurio
Miércoles
12 de diciembre de 2001
Jefe
antitalibán asegura que los miembros de la red terrorista
ocultos en la región prometieron entregarse hoy por la
mañana.
DESTRUCCIÓN.- Los aviones norteamericanos han continuado
bombardeando la zona de Tora Bora y Meelawa, lo que ha
permitido que las fuerzas antitalibanes ocuparan algunas
de las cavernas donde se escondían los milicianos
integristas. |
Agencias
TORA
BORA.- Los combatientes tribales afganos, respaldados por
devastadores bombardeos y ataques de las fuerzas especiales
de Estados Unidos, ocuparon ayer las cavernas de Tora Bora
donde se refugiaban los remanentes de Al Qaeda, y fijaron
un plazo para la rendición incondicional de la red terrorista
de Osama bin Laden.
Varias naves AC-130 atacaron la zona la noche del martes,
antes del plazo para la rendición.
El jefe de defensa de la alianza tribal oriental, Mohammed
Zaman, declaró un alto al fuego y exigió que las fuerzas de
Al Qaeda se desarmen y salgan de los valles de Tora Bora y
Meelawa, a más tardar a las 8:00 hora local (12:30 en Chile)
de hoy o de lo contrario enfrentarían un nuevo ataque.
Zaman agregó que los combatientes extranjeros serán entregados
a la ONU para ser sometidos a tribunales internacionales de
justicia.
"Los combatientes de Al Qaeda en las montañas han pedido tiempo
hasta mañana. Se han detenido todos los ataques. Nuestro grupo
de tropas o las norteamericanas no los atacarán. Han prometido
entregarse mañana por la mañana", aseguró ayer el comandante
Zaman.
Se estima que unos 1.000 combatientes de Al Qaeda se encuentran
actualmente atrincherados en el fortín de Tora Bora, cerca
de la frontera afgana con Pakistán.
Hablando por radio, algunos combatientes pidieron clemencia
y dijeron que se rendirían.
Los combatientes de Al Qaeda "me llamaron y dijeron: por favor
no siga atacándonos, queremos rendirnos", dijo Zaman.
Zaman añadió que los miembros de Al Qaeda accedieron a rendirse
en pequeños grupos, pero se manifestó escéptico ante la posibilidad
de que se desarmen pacíficamente. "Esta noche concertaremos
un plan para sacarlos", agregó .
Era difícil anticipar si las fuerzas de Al Qaeda en Tora Bora
se entregarían efectivamente o no. En el pasado, las fuerzas
de Bin Laden han prometido pelear hasta la muerte.
Estados Unidos no confirmó la eventual rendición de las fuerzas
de Al Qaeda en Tora Bora, según declaró ayer el jefe del Estado
Mayor conjunto, Richard Myers.
"No tenemos confirmación", subrayó el general Myers durante
un encuentro con los periodistas.
El contacto con el grupo de Al Qaeda surgió luego que Hazrat
Ali, un prominente comandante de la alianza tribal, dijo que
sus fuerzas habían tomado una de las dos cumbres de la montaña
Enzeri Zur. Centenares de combatientes, principalmente árabes
y musulmanes extranjeros, se habían detenido ahí tras ser
desalojados de sus refugios durante la noche por los intensos
ataques estadounidenses.
"Capturamos un montón de cuevas. Las más grandes estaban llenas
de documentos y artículos de uso personal", dijo Ali. Los
miembros de Al Qaeda "han comenzado a huir, pero continuaremos
combatiéndolos hasta matarlos o capturarlos", añadió.
Las detonaciones de cañones y ametralladoras resonaban a través
de los valles, mientras los aviones B-52 y las aeronaves norteamericanas
de reconocimiento sobrevolaban la zona en círculos. También
había helicópteros estadounidenses participando de las operaciones.
Las tropas afganas informaron que decenas de soldados estadounidenses
armados se dirigían al frente la noche del lunes, y que se
escucharon disparos de armas pequeñas durante la noche. Los
estadounidenses regresaron el martes, antes del amanecer,
a su campamento.
Detectan a Bin Laden
Mientras se precipita la derrota de Al Qaeda, los servicios
de inteligencia de Estados Unidos recibieron una clara confirmación
de que Osama bin Laden y su círculo más cercano se encuentran
en Afganistán, en las montañas de la región de Tora Bora,
informó anoche una fuente del Pentágono.
Según la cadena de televisión ABC, la información fue obtenida
luego de que un avión estadounidense descargó una poderosa
bomba cerca de los supuestos cuarteles del líder de Al Qaeda
en las montañas de Tora Bora. Además de destruir el lugar,
el estallido provocó un inmediato intercambio de comunicaciones
radiales y satelitales entre miembros de Al Qaeda.
ABC indicó que esas comunicaciones suministraron la confirmación
de que Bin Laden y sus lugartenientes permanecen en la región.
La aparente derrota de ayer coincidió con la fecha en que
se cumplen los tres meses de los ataques terroristas en Estados
Unidos, que según Washington fueron organizados por Bin Laden.
El gobierno norteamericano ha ofrecido una recompensa de 25
millones de dólares por cualquier información que conduzca
a su captura.
Fortalezas subterráneas
Afganistán tiene muchos complejos de cuevas similares a Tora
Bora, invulnerables y donde sus defensores pueden resistir
durante años sin ser percibidos, dijo ayer el general Majmud
Hareev, presidente de la Academia de Ciencias Militares rusa.
"Tales fortalezas subterráneas no pueden ser destruidas; lo
máximo que se puede hacer es acabar con sus entradas y salidas.
Pero eso no sirve para nada", señaló Hareev.
Según explicó Hareev, aunque caiga Tora Bora, otros grupos
de talibanes y miembros de la red terrorista Al Qaeda, dirigida
por Osama bin Laden, pueden estar refugiados en esas redes
de túneles dispersos por el sur y este de Afganistán, sobre
todo en las provincias de Kandahar y Ghazni, cerca de las
ciudades de Gardez y Jost.
"Lo peor no son estas catacumbas, sino el hecho real de que
la mayor parte de sus ocupantes ya las abandonaron y se encuentran
entre la población pacífica de Afganistán y Pakistán", señaló
Hareev.
El experto militar indicó a la agencia Interfax que para aniquilar
tales complejos de búnkers subterráneos "sería preciso trasladar
a toda la población de la Tierra a Marte".
Otros expertos ex combatientes en Afganistán durante la invasión
soviética de 1979 a 1989 indicaron ayer que sólo una bomba
nuclear táctica sería capaz de infligir daños serios a Tora
Bora, con instalaciones construidas a 350 metros bajo el nivel
del mar. |