Futuro
de Afganistán
Alianza del Norte rechaza despliegue de fuerza de seguridad extranjera
El
Mercurio
Jueves
29 de noviembre de 2001
Delegados de la facción que ocupa Kabul afirmaron que sus efectivos son suficientes para mantener la paz en el país.
DELEGADO.- Yunis Qanooni, delegado de la Alianza del Norte
en Bonn, recalcó que ya hay seguridad en Afganistán. |
Agencias
BONN.- La opositora Alianza del Norte rechazó ayer, en un
principio, una propuesta de la Organización de Naciones Unidas
(ONU) de establecer una fuerza de seguridad extranjera en
Afganistán tras la caída del régimen talibán, argumentando
que "ya hay seguridad" en el país.
Una fuerza de seguridad es uno de dos temas básicos que deben
ser decididos en una conferencia convocada en Alemania por
la ONU para decidir el futuro político del país. El otro es
el establecimiento de un gobierno interino.
"No consideramos que haya necesidad de una fuerza extranjera,
ya hay seguridad", dijo a la prensa el dirigente de la delegación
de la Alianza, Yunis Qanooni. Aseguró que sus hombres son
suficientes para mantener la paz en el país.
Agregó que todo cuerpo que se crease con tal fin debía estar
constituida por afganos.
De todas formas, Qanooni no excluyó del todo el envío de una
fuerza internacional, indicando que "puede en un principio
formar parte de un paquete global de paz".
La ONU ha presentado tres propuestas para una fuerza de seguridad
que garantice la paz en Afganistán tras la derrota del régimen
talibán: Una fuerza afgana, una fuerza de paz de ONU y una
fuerza internacional de seguridad. Funcionarios han dicho
que una fuerza internacional sería lo más realista.
Caso del ex Rey
Qanooni también limitó las posibilidades de que el ex rey
afgano Mohammed Zahir Shah sea colocado al frente de un gobierno
interino al decir que sólo tendría un papel que desempeñar
si es elegido por un consejo nacional.
"No creemos en el papel de una persona o de una personalidad.
Creemos en un sistema, como es por ejemplo la loya jirga"
o consejo nacional, declaró. "Si el pueblo accede a través
de una loya jirga a que el Rey tenga un papel, por supuesto
que nadie se lo va a negar".
Todas las delegaciones coinciden en que el depuesto monarca,
de 87 años, por seguir siendo la figura más popular y respetada
de Afganistán, podría ejercer un papel integrador, pero eso
no significa que haya consenso para incorporarlo al escenario
político.
Para la delegación del llamado Grupo de Chipre, tradicionalmente
apoyada por Teherán, no conviene crear precedentes que abran
el camino a la reinstauración de la monarquía (Irán tiene
un sha en el exilio, el heredero de Mohamed Reza Pahlevi),
mientras que el Grupo de Peshawar, considerado aquí la voz
de Pakistán, está dividido.
Los enviados del ex rey (abdicó tras ser depuesto) están al
tanto de esos recelos, de ahí que su discurso se limite a
la repetición de la misma frase: Mohammed Zahir Shah está
dispuesto a contribuir a la paz y el bienestar del pueblo
afgano, si éste se lo pide.
El enviado estadounidense James Dobbins había indicado el
martes que las cuatro facciones aceptaban a Zahir Shah como
factor de unificación y que la Alianza del Norte había aceptado
un papel simbólico para el ex soberano en el nuevo gobierno
afgano.
"El rol del antiguo rey es importante", destacó ayer, por
su parte, el representante de la ONU, Francesc Vendrell, quien
recalcó que las delegaciones han enviado señales de que estarían
dipuestas a otorgarle al ex Monarca un papel relevante.
Si bien la jornada no fue auspiciosa, al finalizar el día
la Alianza acordó los lineamientos de un mecanismo para compartir
el poder con los monarquistas afganos.
"Se acordó establecer un consejo provisional, pero el mecanismo
para su creación será discutido mañana jueves", dijo Qanooni.
"Lo que discutiremos es cómo muchas personas pueden integrarlo
y quién debe estar en el consejo", puntualizó.
El consejo sería una legislatura designada capacitada para
nombrar un ejecutivo interino que gobierne el país por varios
meses.
Vendrell dijo, por su parte, que esperan que la cita concluya
antes del 5 de diciembre. "En esta fecha, se celebrará en
Berlín una conferencia de donantes para Afganistán", anunció.
Por último, manifestó que no cree que fracasen las conversaciones,
pero no descartó que sea necesaria otra conferencia en la
que se sellen los acuerdos preliminares. |