LONDRES.- El Primer Ministro británico, Tony Blair, aseguró ayer que el Reino Unido está completamente de acuerdo con Estados Unidos sobre la operación en Afganistán, tanto desde el punto de vista militar como humanitario, político y diplomático.

Durante una comparecencia en la Cámara de los Comunes, Blair desmintió que haya desacuerdo con Estados Unidos sobre el despliegue de tropas en el país centroasiático.

A raíz de las declaraciones de la ministra británica de Desarrollo Internacional, Clare Short, quien criticó al Gobierno estadounidense por no hacer más en el terreno humanitario, la prensa londinense informó ayer de la existencia de diferencias entre Londres y Washington sobre el envío de tropas a Afganistán.

El líder del Partido Conservador, Iain Duncan Smith, preguntó a Blair si los objetivos del Reino Unido y Estados Unidos continúan siendo destituir al régimen talibán, capturar a Osama bin Laden, desmantelar la organización que dirige, Al Qaeda, y dar ayuda humanitaria a la población afgana.

El Premier respondió que "hay un completo acuerdo, tanto en los objetivos militares de destituir al régimen talibán, lo que me complace poder decir que casi se ha conseguido", a la vez que resaltó que "hemos hecho sustanciales progresos" en la caza de Bin Laden y Al Qaeda.

Explicó que los dos países también están de acuerdo en los aspectos político y diplomático, así como en asegurar que "la ayuda humanitaria llega a Afganistán, lo que - según dijo- es vital".

Sin embargo, la ministra británica insistió en la necesidad de un mayor despliegue de tropas británicas para evitar una crisis humanitaria de proporciones en ese país .

En declaraciones a la emisora de Radio 4 de la BBC, Short afirmó que "todos saben que nosotros y los franceses estábamos preparados para ir (a Afganistán)... para estar rápidamente allí mientras se restablece el orden y se instaura un nuevo gobierno, pero ha habido un retraso. Eso es lamentable".

En otros juicios, recogidos por el londinense "The Times", se quejó de que la coordinación entre las organizaciones de ayuda humanitaria y el cuartel general estadounidense "no está funcionando particularmente bien", causando problemas al personal. "Las comunicaciones existen, pero no están siendo tomadas suficientemente en serio en los niveles más altos", precisó.

Por último, criticó el escaso compromiso de EE.UU. en la tarea de aliviar la pobreza en el mundo. Sostuvo que ese país aporta sólo el 0,1 por ciento de su ingreso nacional a la ayuda internacional.