Las cartas con ántrax mataron en Estados Unidos a cinco personas e infectaron a otras dieciocho el año pasado. La foto de archivo muestra la clausura por parte de agentes especiales del FBI de un edificio con ántrax en Florida.

WASHINGTON.- Incentivada por la cantidad de cartas con ántrax que siguieron a los ataques terroristas del 11 de septiembre, la administración de George W. Bush ha decidido solicitar US$ 11 mil millones durante dos años para proteger la nación del terrorismo biológico.

El Mandatario envió ayer al Congreso un proyecto de presupuesto de 2,13 billones de dólares, que incluye un sensible aumento del gasto para la guerra contra el terrorismo y la seguridad interna.

Altos personeros de la administración manifestaron que el presupuesto del Presidente Bush para el año fiscal 2003, el cual se inicia en octubre, propone US$ 5 mil 900 millones para financiar mejoramientos en el sistema de salud pública de la nación lo cual ayudaría a defenderse contra el uso deliberado de enfermedades como un arma.

Las cartas con ántrax, las que causaron la muerte de cinco personas, infectaron a 18 e hicieron que 30 mil norteamericanos tuvieran que seguir un tratamiento con antibióticos, constituyeron el primer ataque biológico significativo en EE.UU. Personeros dijeron que ellas ponían al descubierto serias vulnerabilidades, en especial en salud pública.

La nueva solicitud presupuestaria refleja un esfuerzo por abordar aquellas debilidades. También refleja la creciente influencia de la Oficina de Seguridad del Territorio Nacional, que encabeza Tom Ridge.

El aumento presupuestario, de US$ 1.400 millones a US$ 5.900 millones, es más de cuatro veces lo que la administración destinó antes de los ataques del 11 de septiembre para combatir la amenaza del bioterrorismo.

"Las cartas con ántrax nos mostraron que incluso un ataque en pequeña escala relativamente poco sofisticado puede causar una enorme alteración, puesto que nuestros recursos para hacer frente a tales amenazas son bastante mínimos", declaró un alto miembro de la administración.

Un análisis de la solicitud de presupuesto para el bioterrorismo muestra que Bush desea introducir no sólo US$1.800 millones en agencias federales vinculadas a biodefensa sino también US$1.600 millones en sistemas de salud locales y estatales que han sufrido años de presupuestos bajos.

Vacunas y antibióticos

El presupuesto propuesto proporciona US$ 650 millones para expandir la reserva nacional de vacunas y antibióticos que se pueden transportar de inmediato a la escena del brote de una enfermedad, como también miles de millones de dólares para financiar la construcción de nuevos laboratorios de contención de alto nivel y llevar a cabo una investigación básica y aplicada sobre nuevas drogas, biodetectores y mejoramientos en comunicaciones y otros sistemas que pongan en contacto a las autoridades encargadas de la preparación para una emergencia local, estatal y federal.

El Dr. Anthony S. Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas perteneciente a los Institutos Nacionales de la Salud (NIH), aseveró que era probable que la enorme infusión de ayuda federal para la investigación básica y aplicada se estuviera "transformando".

"La solicitud de US$1.750 millones para los Institutos Nacionales de la Salud es la mayor petición anual para un instituto en la historia de los NIH", precisó Fauci. "Ésta es la primera vez que una cantidad extraordinaria de dinero se aumenta expresamente para bioterrorismo más bien que para un acrecentamiento de las capacidades".

Después de los ataques terroristas del 11 de septiembre y la cantidad de cartas con ántrax en octubre, Ridge seleccionó biodefensa como una de las cuatro áreas cruciales en seguridad interna que recibiría un gran aumento presupuestario, además de la seguridad en los aeropuertos de la nación.

El proyecto de presupuesto contempla aumentos considerables en cada una de las otras tres áreas: el dinero para las actividades y el personal encargado de la respuesta a una emergencia subirá de US$ 291 millones a US$ 3 mil 500 millones y el gasto para seguridad limítrofe de US$ 8 mil 700 millones a US$ 10 mil 600 millones, mientras que el gasto en seguridad y tecnología de información se espera que aumente en cerca de US$ 700 millones.

En total, precisaron funcionarios, el presupuesto de seguridad interna para el año 2003 subiría de US$ 19 mil 150 millones a US$ 37 mil 700 millones.

Fauci dijo que estaba dando los toques finales a un plan estratégico de gasto para el dinero adicional que recibirá su instituto, el cual se beneficiará de un aumento del 61%.

Programa de armamentos

El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, solicitó ayer al Congreso de su país que apruebe un aumento de 48 mil millones de dólares al gasto militar. Algunos programas de armamentos que serán financiados con el presupuesto del Pentágono para el año 2003 son los siguientes:

4,6 mil millones de dólares para 23 cazas F-22 y como adelanto de pago por otros 27 cazas F-22 en 2004.

3,5 mil millones de dólares para el desarrollo del Caza de Ataque Conjunto, un avión de nueva generación que utilizará la Fuerza Aérea, la Armada y los Infantes de Marina.

2,4 mil millones de dólares para facilitarle al Ejército estadounidense la organización de una fuerza más rápida y ligera, incluyendo 812 millones de dólares para adquirir unos 332 vehículos blindados; 707 millones de dólares para desarrollar "un sistema de combate del futuro"; y 911 millones de dólares para el desarrollo y fabricación del nuevo helicóptero de reconocimiento Comanche.

1,1 mil millones de dólares para aumentar la producción de municiones dirigidas por satélite y diversas bombas guiadas por sistemas láser. Además, se incluyen 146 millones de dólares por los misiles cruceros Tomahawk y 54 millones de dólares para desarrollar una bomba pequeña que le permita a los aviones cazas y a los bombarderos norteamericanos aumentar su capacidad de cargar municiones.

1,0 mil millones de dólares para comenzar la transformación de cuatro submarinos balísticos Trident en submarinos capaces de transportar 150 misiles Tomahawk y un grupo de fuerzas especiales.