Washington
Huellas
de ántrax en oficina postal de la Casa Blanca
El
Mercurio
Miércoles
24 de octubre de 2001
La dependencia, que está ubicada a kilómetros de la sede de gobierno, fue cerrada para mayores pruebas y descontaminación.
CONFIANZA.- Frente a la información, El Presidente
George Bush dijo que se siente seguro y recalcó
que no padece la enfermedad. |
David
Stout, The New York Times
WASHINGTON.- Restos de ántrax se encontraron ayer en un centro que selecciona la correspondencia dirigida a la Casa Blanca, anunció el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer.
El vocero afirmó que las pruebas habían confirmado la presencia de la bacteria en dicha oficina, ubicada en una instalación militar a 10 kilómetros de la misma Casa Blanca. Fleischer agregó que la instalación "se había cerrado para mayores pruebas y descontaminación".
El Servicio Secreto precisó que un aparato que se usa para abrir cartas sin ayuda humana había dado positivo para ántrax.
Nadie en el sitio ha informado de síntomas consistentes con la sustancia, y las pruebas a los funcionarios y las dependencias del complejo mismo de la Casa Blanca no han revelado signos de contaminación.
Ni el Servicio ni Fleischer identificaron la instalación militar, pero la cadena de noticias CNN aseguró que se trataba de la Base Bolling de la Fuerza Aérea, en Maryland.
"No tengo ántrax"
Desde los ataques terroristas del 11 de septiembre la inspección de la correspondencia de la Casa Blanca se ha intensificado. "La Casa Blanca tiene gran confianza en vista de las precauciones de seguridad en el lugar", aseveró Fleischer.
El mismo Presidente George Bush expresó a los reporteros ayer que se siente seguro. "Tengo la seguridad de que cuando vaya a trabajar mañana estaré a salvo", manifestó. Declinó comentar sobre si lo habían sometido a pruebas, y sólo agregó, "No tengo ántrax".
El Servicio Secreto precisó que el origen de las esporas se desconoce. Observó, no obstante, que el correo dirigido a la Casa Blanca pasa a través de Brentwood Road, centro de procesamiento al noreste de Washington, donde se ha detectado ántrax y ha afectado a varias personas.
De este modo, parecía posible que el correo contaminado destinado a la Casa Blanca pudiera no haber sido envenenado intencionalmente.
Más temprano, autoridades de Nueva Jersey habían anunciado que se cree que una mujer que trabaja en una oficina de correos donde llegaron las cartas contaminadas está gravemente enferma con la forma inhalada de la sustancia.
Y en Washington, funcionarios de la salud declararon en una conferencia de prensa que las pruebas habían confirmado que las muertes de dos empleados postales del área de Washington se debieron al ántrax, como sospechaban. |