Bombardeo
nocturno:
Segunda
gran ofensiva contra Afganistán
El
Mercurio
Martes
9 de Octubre de 2001
Estados Unidos dijo que la campaña será de largo aliento y advirtió que podría
efectuar acciones contra otras naciones.
Pablo
Soto González, enviado especial.
ISLAMABAD.-
Estados Unidos lanzó ayer una segunda oleada de ataques sobre Afganistán como
parte de un operativo que tomará largo tiempo, según advirtieron las autoridades
norteamericanas. Por segunda noche consecutiva el cielo de Kabul se iluminó
con el estallido de las bombas y el fuego antiaéreo con que respondieron los talibanes.
También fueron atacadas las ciudades de Kandahar (sur), Jalalabad (este), Mazar-e-Sharif
y Kunduz (norte). Los blancos de los ataques fueron aeropuertos y otras
instalaciones estratégicas de los talibanes como centros de telecomunicaciones
y defensas antiaéreas. Además del aeropuerto de Kabul - atacado ayer
por segunda vez- , en la capital los proyectiles impactaron sobre una emisora
de televisión y en las cercanías de un hospital, agregó la agencia de prensa islámica
AIP, con sede en Pakistán. Corte de luz Como efecto de
los ataques se cortaron la luz y las comunicaciones en las ciudades afganas. La
radio de los talibanes urgió a los residentes a permanecer en sus casas y cerrar
las ventanas, agregó la emisora. Hasta ahora sólo se sabe de las muertes
producto de los bombardeos del comandante de la Fuerza Aérea afgana, Ajtar Mohammad
Mansur, y del general talibán, Omar Ataie, según informó la agencia iraní IRNA.
Sin embargo, el fallecimiento de Mansur fue negado por los talibanes.
Los ataques comenzaron poco antes de las 21:30 hora local en Afganistán (12:30
de Chile), cuando entraba en vigor un toque de queda. El Pentágono dijo
que en el ataque se utilizaron 10 bombarderos de gran altura y 10 basados en portaviones.
También algunos misiles Tomahawk - lanzados desde barcos estadounidenses- atacaron
sitios estratégicos de los talibanes, dijo el general Richard Myers, jefe del
Estado Mayor Conjunto de EE.UU. Una segunda oleada de bombardeos, en
la que sólo participaron aviones norteamericanos, fue lanzada poco antes del amanecer
de hoy martes. Fuerzas británicas otorgan apoyo logístico a la ola de
ataques de ayer, pero no dispararon misiles o bombas, dijo un portavoz del Ministerio
británico de Defensa. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald
Rumsfeld, dijo que continuarían los bombardeos y se agregarían "blancos adicionales".
El régimen de los talibanes es blanco de los ataques por su negativa a entregar
a Osama bin Laden, el principal sospechoso por los atentados del 11 de septiembre.
En una carta dirigida al Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos justificó
los ataques por su derecho a la "legítima defensa" y previno que podría efectuar
"otras acciones" contra otras organizaciones y estados. Al evaluar los
primeros bombardeos sobre Afganistán, efectuados el domingo, Estados Unidos los
consideró como un éxito. "La misión militar (del domingo) fue ejecutada tal como
se planeó", dijo el Presidente George W. Bush minutos antes de iniciarse la segunda
ola de ataques. No obstante, vaticinó que esta "será una guerra larga"
que "requiere la comprensión y la paciencia del pueblo estadounidense".
Según informó Donald Rumsfeld, los primeros ataques lograron dañar las baterías
antiaéreas de los talibanes, pero todavía continúan operativos varios centros
de comando que van a ser destruidos. Rumsfeld explicó que se atacaron 31 objetivos
específicos y que al menos 23 de ellos estaban fuera de las ciudades.
"Nuestro objetivo fue crear las condiciones para operaciones antiterroristas y
humanitarias sostenidas", indicó. Confirmó que EE.UU. busca no sólo eliminar
a Bin Laden y a su red Al Qaeda, sino también desplazar del poder a los talibanes.
"No hay dudas de que el grupo de gente que están estrechamente ligados a
Al Qaeda, incluyendo a (el líder talibán, el mullá Mohammed ) Omar y sus lugartenientes,
son dañinos y peligrosos para el mundo, y que Afganistán estaría mucho mejor sin
ellos", manifestó. Interrogado sobre la muerte de civiles a raíz de los
ataques militares, Rumsfeld dijo que "no queda ninguna duda de que la gente que
se encontraba cerca de los objetivos formaba parte de Al Qaeda o eran militares
talibanes". Según las primeras estimaciones hechas por los talibanes,
lo ataques del domingo dejaron 20 muertos, pero posteriormente el viceministro
de Sanidad talibán, Mohammad Abbas, rebajó la cifra a ocho. Reacción
de los talibanes Frente a los ataques lanzados contra su país los
talibanes condenaron ayer en Islamabad, la única ciudad en el mundo donde tienen
una embajada, la ofensiva aliada. "Es un acto terrorista", dijeron por medio de
su embajador Abdul Salam Zaeef. Washington y Londres han tenido especial
cuidado en declarar que las acciones armadas son contra blancos específicos, parte
de la red de campamentos terroristas de Bin Laden en Afganistán. Por
eso, precisan que la guerra no es contra el pueblo afgano sino contra los terroristas
que se cobijan en ese territorio. El ataque lanzado ayer, casi 24 horas después
del primero, generó gran tensión en Afganistán, donde se sucedieron las protestas
contra EE.UU. Para que no queden dudas de que el ataque no es contra
los afganos, EE.UU. informó que volverá a lanzar ayuda humanitaria a los afganos
que huyen de la guerra y que en calidad de refugiados han copado los campamentos
de la frontera de Afganistán y Pakistán. Apoyo del Consejo de Seguridad
Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU expresaron su unánime apoyo
a los ataques de Estados Unidos y Gran Bretaña contra Afganistán, informó ayer
el presidente del Consejo, Richard Ryan. Agregó que se "mantuvo totalmente"
la unanimidad del Consejo expresada ya en la condena a los atentados del 11 de
septiembre. Ryan, embajador de Irlanda, hizo sus comentarios luego que los representantes
de Estados Unidos y Gran Bretaña informaron a puertas cerradas a los otros 13
miembros del Consejo sobre las acciones lanzadas el domingo contra Afganistán.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, confirmó ayer
la legitimidad de los ataques por parte de fuerzas militares estadounidenses y
británicas contra objetivos en Afganistán. EE.UU. y Gran Bretaña habían
informado al Consejo el domingo sobre el inicio de sus incursiones que, según
ellos, "marcan el comienzo de una fase militar, de un esfuerzo múltiple y global
contra el terrorismo internacional, que tiene aspectos militares, diplomáticos,
financieros, policiales y de inteligencia".. . |