El Centro de Control de Enfermedades (CDC) - por sus siglas en inglés- de Atlanta, Estados Unidos, confirmó al Ministerio de Salud chileno la presencia del bacilo del ántrax en el sobre recibido la semana pasada en un laboratorio de la comuna de Las Condes.

Ello reafirmó los resultados a que llegó inicialmente en Santiago el Instituto de Salud Pública (ISP).

Pero sólo en los primeros días de la semana próxima se sabrá el resultado de los procedimientos para identificar genéticamente la cepa específica del bacilo, es decir, el que está usando el bioterrorismo. En eso trabajan tanto el CDC como el ISP.

Los muestreos ambientales realizados tanto en las oficinas del Laboratorio de Especialidades Pediátricas (LEP) de Avenida Cuarto Centenario 200, donde permaneció el sobre con ántrax, como en Correos de Chile, resultaron negativos, determinándose que no existen esporas ni contaminación en esos sitios.

Las trece personas que estuvieron expuestas continúan en tratamiento preventivo y en buen estado de salud. Ellas son los doce profesionales del laboratorio que dirige el doctor Antonio Banfi Pacheco y él mismo.

En cuanto a los cuatro hallazgos de sobres sospechosos en Santiago y Viña del Mar, dos en cada ciudad, siguen los análisis y deberían conocerse sus resultados la semana entrante. Lo mismo ocurrirá con un sobre que llegó ayer a la Embajada de Israel en la capital.

La ministra sumariante Rosa María Maggi, que fue designada por la Corte de Apelaciones de Santiago para investigar la carta con ántrax, dictó ayer las primeras resoluciones. La magistrada acogió a tramitación el requerimiento del Ministerio del Interior y despachó a la policía las primeras citaciones.