Marcos Riquelme fue oficializado el viernes como el primer fichaje de Universidad de Chile de cara al segundo semestre y este lunes fue presentado formalmente a los medios como nuevo refuerzo azul.
En la ceremonia, el delantero argentino, que llega proveniente del Bolívar de La Paz, se mostró contento por su regreso al fútbol nacional y explicó su decisión para arribar al conjunto estudiantil.
"En la cabeza juegan muchas cosas. Es un desafío muy grande, y estoy bien, preparado para tomarlo de la mejor manera. Quien no quisiera llegar a un club como la Universidad de Chile. Jugar en un equipo como la U era algo pendiente que tenía de mi paso anterior por el fútbol chileno", reconoció el ariete trasandino.
"Tenía una oferta buena de un equipo de Arabia. Pero cuando me enteré que había una pequeña posibilidad de venir acá, llamé a mi representante para que estire esa negociación. Sabía que no había cupo de extranjero y tenía que esperar que se generara uno. Cuando se liberó, le dije a mi representante que dejara lo de Arabia", añadió.
Respecto a la falta de finiquito del club y la presión de ser la carta de gol para intentar sacar al club de la parte baja de la tabla, sostuvo: "No soy el salvador, ni yo ni nadie. Del momento que está pasando la U tenemos que salir todos juntos".
"Tengo que tratar de hacer las cosas que venía haciendo en clubes anteriores. Sé que debe haber una presión por lo que se habló a mi llegada, un poco polémica. Es un desafío que se toma con mucha seriedad, es algo difícil. La U no merece estar en el lugar que está, y este parate (receso) sirvió mucho para mejorar", complementó.
De todas formas, el ex Palestino y Audax Italiano se tiene fe. "Quizás estoy en el mejor momento personal. He convertido 50 goles en 84 partidos en Bolívar. Me tocó salir goleador y hacer los goles de los dos títulos que tengo con Bolívar. Eso me da mucha confianza".
Por último, Riquelme aclaró que "no estuve antes ni estaré el fin de semana, pero espero estar para la segunda rueda ante Palestino. Estoy bien físicamente. Los últimos cinco días estuve entrenando aparte, por lo que hablé con Nacho Berriel (preparador físico de la U) y le dije que quería ponerme a punto lo más rápido posible".