Cobreloa atraviesa un momento altamente complejo. El martes perdió 1-0 de local ante Ñublense y está penúltimo en la tabla del Torneo Nacional, por lo que por ahora perdería la categoría.
El ambiente se caldeó en Calama. Tras el final del partido en el Zorros del Desierto, hinchas del cuadro naranja fueron a encarar a los futbolistas.
Hubo fuertes insultos e incluso reproches al comportamiento fuera de la cancha de los jugadores ("se la pasan con la caña", gritó una mujer).
A Bastián Valdés le sentaron mal esas palabras. Fue donde estaban los hinchas para responderles. Tuvieron que frenarlo para que la tensión no creciera aún más.
Han sido días complejos para el club. Durante las fiestas patrias, el mediocampista Mario Sandoval protagonizó un accidente en estado de ebriedad y Cobreloa decidió despedirlo.
Botellazo a Mario Salas
La pelea entre hinchas y jugadores de Cobreloa no fue la única polémica extrafutbolística de la jornada en Calama. Mario Salas, DT de Ñublense, fue atacado.
Mientras celebraba el agónico gol de Patricio Rubio, el "Comandante" recibió un botellazo que lo dejó tendido sobre el césped.
Afortunadamente, Salas está bien y alzó la voz en conferencia de prensa.
"Una persona me lanzó una botella en forma muy agresiva, muy violenta. La verdad es que me raspó y me golpeó la mano. Quizás si esa botella hubiese pegado un poquito más adentro, me hubiese pegado más de lleno en la cara o en la sien. A lo mejor estaría en otro lugar u otro lado", expresó.
"Creo que hay que tomar las medidas que corresponden al caso. Son hechos que no pueden pasar desapercibidos", cerró.
