SANTIAGO.- Manifestaciones por el anuncio de despidos, el arribo del grupo Secuoya y las acusaciones de abuso sexual en contra de Herval Abreu, son algunas de las situaciones que han mantenido en jaque a Canal 13 durante las últimas semanas.
El director ejecutivo de la estación, Javier Urrutia, y el subdirector y representante de la familia dueña del canal, Maximiliano Luksic, son los rostros que han aparecido a enfrentar estos difíciles momentos ante los cuestionamientos de los trabajadores y también de los medios de comunicación.
Urrutia es abogado de la Universidad de Chile y asumió el mando de Canal 13 en agosto de 201,7 tras años de experiencia en los medios de comunicación.
Antes de llegar a la televisión, fue nombrado editor de negocios y luego director del extinto
El Metropolitano. Tras ello, pasó a
Chilevisión con el cargo de secretario general, y en enero de 2004, con 32 años, reemplazó a Jaime de Aguirre como
director ejecutivo de la estación.
Cuatro años más tarde, partió a Perú contratado por el canal Frecuencia Latina, donde se mantuvo por un año y medio como ejecutivo. En 2010 regresó a los medios nacionales para tomar la labor de director ejecutivo de La Red, cargo que ostentó por siete años y al que renunció para llegar a Canal 13.
En entrevista con la revista Capital, el propio Urrutia se calificó como un hombre "más bien pragmático, frío y analítico", y un jefe capaz de llamar desde su casa si ve algo que se está transmitiendo y que no le parece correcto.
Por su parte, Maximiliano Luksic (31) es el tercer hijo de Andrónico Luksic Craig, quien a través de su empresa TV Medios controla la totalidad del canal -esto luego de que se concretara la salida de la Universidad Católica que le vendió el 33% que le quedaba en US$ 10 millones-.
Lleva más de un año en la estación televisiva tras su llegada como brand manager en el área de marketing. En julio de 2017, asumió el cargo de subdirector ejecutivo que mantiene hasta hoy en día.
Antes de eso su vida estaba en Croacia, donde trabajaba junto a su hermano Davor en el negocio hotelero de su familia (Adriatic Luxury Hotels, Playa Laguna e Istraturist). Al igual que algunos de sus familiares, se graduó en economía y empresas en el Babson College, una escuela de negocios privada de Massachusetts.
La crisis por la llegada del grupo Secuoya
Javier Urrutia viajó en febrero pasado a Madrid para conversar con la plana mayor del canal Antena 3 y saber cuál había sido el trabajo del grupo español de comunicaciones Secuoya, al que se le dará la función de externalizar algunas áreas de Canal 13.
En la última semana, además, dio a conocer pérdidas históricas de la estación que superan los 26 mil millones de pesos, una cifra que viene a justificar en parte el cambio a Secuoya y el importante número de despidos que ello implica.
La información de que "parte" de los trabajadores de la estación serán desvinculados, fue confirmada por el propio Urrutia a través de un correo que le envió a los funcionarios el pasado viernes 27 de abril. Los motivos, según sus palabras, son principalmente para
"preservar el futuro de nuestro canal".
En la misma misiva, Urrutia detalló que las "condiciones de salida" se están estudiando para que quienes pierdan su trabajo sean compensados "con una indemnización total y sin tope de años", además de sumarles una compensación "voluntaria por parte del canal".
Maximiliano Luksic se ha restado de comentar sobre la crisis y la llegada de Secuoya a la estación. Quien sí lo ha hecho es su padre Andrónico, quien justificó los despidos como una decisión de la administración para "tomar las medidas, por dolorosas que sean, para intentar hacer viable el Canal".
Las acusaciones por abuso sexual en contra de Abreu
El fin de semana y a través de la publicación de un reportaje en la revista "Sábado", se conocieron las acusaciones de siete mujeres en contra del ex director de teleseries de Canal 13, Herval Abreu, de 54 años.
Castings en su departamento de noche con jóvenes actrices, abuso de poder y acoso sexuales, son algunas de las situaciones que se describen en el extenso trabajo periodístico.
Bárbara Zemelman, guionista, fue una de las mujeres que se atrevió a hablar con el suplemento del diario
El Mercurio. En su relato nombra a
Max Luksic y a Javier Urrutia como ejecutivos que se preocuparon de su situación tras ser desvinculada por el propio Abreu en noviembre de 2017 cuando ella estaba embarazada.
De acuerdo a sus palabras, Urrutia supo de su despido, entendió que había sido un error y se reunió con ella para reintegrarla. Sin embargo, Zemelman no estaba dispuesta a volver si el director continuaba con sus labores en el canal.
En enero de este año Abreu fue despedido. Tras ello, fue Max Luksic quien invitó a almorzar a la guionista para enmendar su despido y reincorporarla. "Él (Luksic) me pidió disculpas por el despido y me ofreció volver. Le dije que ante este nuevo escenario, es decir, la salida de Abreu, no tenía problemas", contó a la revista.
Fue en esa misma instancia en que Zelmelman habló de las situaciones que por años vivió junto Abreu. Luego de eso, fue Luksic quien llevó la información al contralor del canal. La información fue confirmada por Urrutia en el suplemento y calificó las acusaciones como "muy graves". "Es imperdonable que una persona en una posición de poder utilice su cargo para acceder a situaciones impropias", expresó el director ejecutivo de Canal 13.
El medio de comunicación lamentó lo ocurrido y emitió un comunicado manifestando "toda nuestra solidaridad con quienes fueron o se han sentido víctimas". Además, enfatizaron que cuentan con mecanismos internos de denuncia para casos de abuso sexual y que tienen "tolerancia cero a estos casos".