Claudia Sheinbaum y Donald Trump. Ambos líderes dialogaron el miércoles.
AFP
La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el mandatario electo de Estados Unidos, Donald Trump, sostuvieron el miércoles una conversación que giró en torno a migración y seguridad, apenas unos días después de que el republicano amenazara con imponer aranceles a su vecino del sur. Y aunque ambos se mostraron satisfechos, también ofrecieron versiones distintas sobre los temas que se tocaron durante la llamada.
Trump se jactó de haber persuadido a Sheinbaum para que aceptara frenar el flujo de migrantes hacia Estados Unidos, "prácticamente cerrando nuestra frontera sur". Calificó la conversación de "maravillosa" y "productiva".
"
México detendrá a quien vaya a nuestra frontera sur, con efecto inmediato. Esto hará mucho para parar la invasión ilegal a los Estados Unidos ¡Gracias!", escribió el republicano en su red Truth Social.
Sheinbaum, por su parte, señaló que fue una "excelente conversación", en la que le explicó a Trump su estrategia en temas de migración y le aclaró que no están llegando caravanas a la frontera común "porque son atendidas en México", según publicó en la red social X.
Pero, después de los comentarios del estadounidense, publicó un nuevo mensaje en el que mencionó que "la postura de México no es cerrar fronteras sino tender puentes entre gobiernos y entre pueblos".
Más allá de las declaraciones, los datos del gobierno de Estados Unidos indican que la llegada de migrantes a la frontera entre ambas naciones durante el mes de septiembre alcanzaron
su nivel más bajo en cuatro años. El descenso se debe en parte a que el gobierno mexicano contuvo y dispersó a todas las caravanas de migrantes que partieron este año hacia la frontera con Estados Unidos.
Tanto Trump como Sheinbaum indicaron que también hablaron de lo que se puede hacer en materia de seguridad y de lucha contra las drogas, pero ninguno dejó claro si después de esta conversación se había disipado la amenaza de aranceles contra las importaciones desde México.
El Mandatario electo estadounidense dijo el lunes que impondría un impuesto del 25% a todos los productos que ingresen a su país desde Canadá y México y un arancel adicional del 10% a los bienes procedentes de China, y que permanecerían en vigor "hasta detener esta invasión de drogas, en particular del fentanilo, y de todos los extranjeros ilegales en nuestro país".
En respuesta a las amenazas arancelarias, el Gobierno mexicano ha iniciado diálogos con el equipo de transición de Trump y las cámaras empresariales para salvaguardar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
A la par, Marcelo Ebrard, secretario de Economía de México, afirmó que, pese a las recientes amenazas de Trump de imponer aranceles del 25 % a productos mexicanos y canadienses, México no contempla medidas similares y apuesta por el diálogo para fortalecer la relación comercial en sus primeras negociaciones bilaterales.