Esta imagen del río fue captada el domingo pasado.
Prensa del Estuario
SANTIAGO.- De
turquesa a gris. Este es el color que el
río Puelo tomó en el sector cordillerano de Llanada Grande de la comuna de
Cochamó, lo que alertó a los vecinos y activó las alarmas de los expertos que analizan el fenómeno.
Es por esto que un equipo del Sernageomin se instaló en la zona para realizar una serie de estudios técnicos para determinar si este hecho corresponde a alguna razón de tipo volcánica o de otra índole.
"No hay daños y problemas, sólo el cambio de color del agua y el olor a azufre"
Suboficial Juan Collado
Algunos residentes, de acuerdo al diario El Llanquihue, incluso sostienen que han llegado a sentir olor a azufre, lo que aún no ha sido corroborado por los especialistas que alistan su informe técnico.
La fecha del fenómeno es otro hecho a determinar: unos sostienen que fue hace una semana y otros, hace más de siete días.
El suboficial de Carabineros Juan Collado, jefe del retén fronterizo de Llanada Grande, dijo: "El domingo en la madrugada la bajada del lecho del río estaba con el agua de color plomo (sic). El turquesa del río Puelo pasó a un color ceniza".
"Pero pese a ello" -continuó- "no hay temblores, ruidos subterráneos ni nada que se pueda percibir a primera vista, sólo el color del agua que sufrió cambios".
"Cuando uno saca agua y la deja en un vaso se mantiene turbia y no se va al fondo. Esto empezó desde la última crecida del río"
Paulina Ghent
Paulina Ghent vive en la zona y asegura: "Sacamos el agua para verla, pero no hay olor a nada. Cuando uno la saca y la deja en un vaso se mantiene turbia y no se va al fondo. Esto empezó desde la última crecida del río".
"Estamos preocupados, esto ocurre hace más de una semana y nadie ha dicho nada, porque es un problema para el consumo del agua para uno y los animales", alertó.
Carabineros y la comunidad siguen en alerta ante este hecho, cuyas causas se espera que se conozcan próximamente.