Preocupación causó en la comunidad escolar la denuncia que hicieron algunos apoderados del colegio Alicante del Valle de Puente Alto contra una enfermera que vacunó a 745 personas en el establecimiento, y que habría ocupado las mismas jeringas y agujas.
Incluso se sospecha que ni siquiera administró el medicamento, ante lo cual la Seremi de Salud ya inició una investigación, paralela a la que lleva fiscalía, para esclarecer la veracidad de los hechos.
El centro de padres había contactado y contratado a la profesional vía Facebook, pagándole $7.000 por cada inoculación. Según relatos de algunos apoderados, la enfermera
vacunó a 300 menores con solo 80 jeringas.
A raíz de esto, la jefa del organismo metropolitano, Rosa Oyarce, explicó quiénes están habilitados para vacunar y cómo es el procedimiento a seguir.
"Las personas que van a vacunar tienen que contar con un botiquín autorizado o deben proceder de los vacunatorios que tenemos autorizados las seremis de salud", manifestó la autoridad ayer, tras visitar el establecimiento educacional.
Además, sostuvo que "no cualquier persona puede poner vacunas porque sí, eso no está autorizado; sí una persona puede comprar una vacuna en la farmacia de forma individual (aunque) requiere de una receta médica".
"Esto es importante porque también hay riesgos en el momento de aplicar la vacuna, hay personas que son alérgicas y pueden entrar en un shock", añadió.
Por otra parte, la infectóloga de la Clínica Dávila Rosana Benítez, comentó a Emol que "hay cosas en qué fijarse antes, durante y después" del acto de vacunación.
"Toda vacunación debe ser hecha con autorización de la autoridad por agentes acreditados, con vacunas seguras".
Jaime Mañalich, vía Twitter
"El antes es que la persona que vaya a ser vacunada debe consentir la vacuna, principalmente en un colegio: éste debe
emitir un comunicado donde los padres aceptan la vacunación del niño y tiene que decir qué tipo de vacuna se va a dar y cuáles son las contraindicaciones", advirtió.
Además, que "el niño no tenga más de 38°C de fiebre, que no sea alérgico al huevo y que no haya tenido problemas neurológicos importantes".
Al momento de la inoculación, "tienen que haber condiciones mínimas como tener el personal capacitado; material estéril; un lugar donde se depositan estas agujas, que es una cajita".
Y lo más importante, es que "el material que se va a ocupar para darme la vacuna, en este caso la aguja, sea de uso único en esta persona".
Asimismo, enfatizó que "la caja de la vacuna tiene que salir de un lugar donde se mantenga la cadena de frío, entre 2°C y 8°C".
"Siempre hay que dejar constatado que dí la vacuna, en qué fecha y en qué establecimiento".
Rosana Benítez, infectóloga
Y agregó: "
Se debe verificar que la vacuna sea la adecuada porque muchas veces las cajas pueden ser parecidas y lo ideal es que se diga en voz alta el nombre de la vacuna".
La persona que la administra debe limpiar la zona con una gasa o un algodón; pero no es necesario que utilice guantes ya que no hay contacto directo con sangre. "Lo que sí debe hacer es lavarse las manos antes y después del acto. Puede ser con alcohol gel o con agua y jabón".
Por último, "puede desecharla entera o sacar la aguja y tirarla en un lado y el resto en otro".