El Mercurio (Imagen referencial)
En un laboratorio de la región de Vogtland, en el sureste de Alemania, un grupo de ingenieros trabaja por el futuro de los deportes de invierno. Los expertos desarrollaron pistas textiles de esquí para suplir la falta de nieve debido al cambio climático.
La empresa Vis, dedicada a la fabricación de cintas transportadoras, actualmente analiza las propiedades de deslizamiento, la resistencia al frío y la flexibilidad de una base textil sobre la cual algún día podrían desplazarse los esquiadores.
El director de la empresa, Werner Weitz, indicó que "las investigaciones han concluido con éxito".
"Hace diez años comenzamos con la investigación en una pista de esquí textil en una cátedra de tecnología de transporte", explica Jens Reindl, cofundador y gerente de Mr. Snow, empresa que encargó este trabajo.
"Estamos en conversaciones con muchos centros de deportes de invierno en Sajonia. Hay un creciente interés en encontrar soluciones independientes de la nieve", afirma Reindl.
De acuerdo a lo indicado, los costos para implementar y montar una pista de esquí de tamaño medio con la base textil son de alrededor de 550 mil dólares.
Reindl considera que sus propios revestimientos textiles para esquiar son una forma de mantener a los turistas en las zonas de deportes de invierno cuando hay poca nieve. "Con nuestros productos se evitan los costes de energía y de mantenimiento y los ruidos. Además, no hay riesgo de que todo se derrita nuevamente", comentó.
Por su parte, Derrick Schönfelder, director de la Asociación de Esquí del estado de Sajonia, comentó que las alfombras textiles aún no se han desarrollado lo suficiente como atraer el interés de los deportes de competición.
"Seguimos favoreciendo el entrenamiento en la nieve, ya que las competencias se llevan a cabo exclusivamente en la nieve", advirtió.