¿Ya construyó su búnker en algún lugar apartado?, ¿pensó en cómo vivir los últimos meses que nos quedan en este planeta?, ¿se endeudó pensando que total no lo va a pagar pues el mundo se acaba este 2012?, ¿Ha leído al menos una profecía maya o hopi? ¿O es incrédulo y piensa que todo esto son patrañas? ¿O ni siquiera sabe que muchos afirman que en diciembre de 2012 nos vamos todos a negro y que se termina esta película llamada Vida en el planeta Tierra?

A ver, ordenemos esto antes que la paranoia y el marketing futurístico nos superen. ¿Se acaba el mundo sí o no? La respuesta –desde mi mirada, obviamente, querido lector- es… Sí. Pero no de una, no al estilo Hollywood (con catástrofes espectaculares donde se salvan un puñado de chicos buenos que ni se despeinan), ni tampoco este 2012 en específico... El mundo que conocemos como tal (el sistema en el que vivimos, con sus paradigmas económicos, políticos, socioculturales, religiosos, científicos y más) se está cayendo a pedazos desde hace un rato y quien no quiera verlo no ha entendido nada del poderoso proceso que vivimos y que no se detendrá; estamos en plena despedida (disolución) de lo viejo y bienvenida a lo nuevo, fase que durará largos años.

Sólo algunos botones de muestra. Si hace un par de años alguien nos hubiese dicho: miles de personas -sobre todo jóvenes- de distintas partes se organizarán vía Internet, van a protestar y derrocarán gobiernos dictatoriales en África, mientras que en otras latitudes –incluido Estados Unidos- se tomarán plazas y calles para gritar que el mundo es injusto y que esto no es vida. Un gigantesco terremoto y tsunami azotará a Japón (el país más preparado para estos fenómenos) y la ola recorrerá decenas de países incluido Chile, demostrándonos lo unidos que estamos y, al mismo tiempo, que la naturaleza es más fuerte que cualquier avance tecnológico. Estados Unidos y Europa comenzarán a caer pues sus economías estarán en crisis y no se asomarán soluciones, pese al enorme poder que detentan. El rescate de 33 mineros chilenos será un hecho mediático y simbólico sin precedentes, que recorrerá todo el planeta en vivo y en directo. Ya no habrá personajes intocables, pues todo se sabrá por redes sociales y se podrá comentar sin importar quién seas. Millones de personas en el mundo harán silencio y meditación el 11 del 11 del 11, pues será una fecha de unión y elevación de la conciencia…. ¿Qué habríamos dicho de todo esto, ah?

"Afírmense los gobiernos y cualquier estructura cuyo trabajo se relacione con jóvenes"

Este es un tiempo para abrir los ojos, la mente y la conciencia a las señales de cambio que en el 2012 aumentarán y, si estamos atentos, podremos aprovecharlas para tener una vida más armónica, pues no podremos seguir aferrándonos a nuestra estructura antigua de trabajo, relaciones, dinero, salud, educación, etc., que, claramente, se está desintegrando.

Entonces, ¿cómo se vive este renombrado año? De los despiertos, flexibles, emprendedores, responsables de sí mismos, centrados, joviales, desapegados, innovadores, empáticos y alegres será el reino del 2012. Los demás estarían ahora ya saliendo de la ensoñación, la rigidez, las dependencias, la víctima, la neurosis de la prisa, el aferrarse y el pesimismo, si quieren sobrevivir a este agitado año.

¡Adiós, mundo cruel!
Afírmense los gobiernos y cualquier estructura cuyo trabajo se relacione con jóvenes, pues con Urano (aire eléctrico) en Aries (fuego impulsivo), el contexto 2012 seguirá siendo la explosión social liderada siempre por chicos que no cesarán en su arremetida contra un sistema que a todas luces no da para más.

Y las soluciones aún no vendrán ya que lo primero es la agitación para sacudir las mentes y evidenciar que es necesario el cambio. No esperemos propuestas claras, pues Urano desordena, agita, ilumina, revoluciona, pero no construye; eso viene más adelante –si es que el mundo no se extingue este 21 de diciembre, claro.

Este aspecto astrológico incrementará también las rabias y eventualmente las guerras y revueltas; traerá fenómenos (positivos y negativos) con el fuego, la electricidad, la tierra (terremotos) y la energía nuclear. Se incrementarán los avances tecnológicos y el desarrollo de los deportes; ojo con los Juegos Olímpicos 2012, que Urano puede hacer de las suyas para bien y para mal.

"Este es un tiempo para abrir los ojos, la mente y la conciencia a las señales de cambio que en el 2012 aumentarán y, si estamos atentos"

Desde otra esquina del cielo, Plutón (agua que transforma) continúa su poderosa limpieza en Capricornio (tierra conservadora) iniciada el 2008 con la crisis subprime de Estados Unidos y seguirá actuando lenta pero profundamente en ese mismo país y Europa. Este paso de Plutón –que dura hasta el 2024- traerá más erupciones volcánicas (la Tierra se limpia metafórica y literalmente), conciencia y acción por la ecología, revelaciones de oscuridades en el actuar económico y la caída del patriarcado en las estructuras de la sociedad: se desacredita y desorienta la política, cada vez más mujeres llegan al poder, la educación parece obsoleta, ya no hay líderes en el mundo (nómbreme a uno y le doy un premio) y las iglesias no son un referente, al contrario. ¡¿Ah no, si el mundo no está cambiando, entonces qué?!

Y como si fuera poco, a Neptuno (agua inspiradora) después de 164 años se le ocurre sumergirse en Piscis (agua compasiva), con lo que este elemento se intensifica: podemos esperar más temas con el agua (desde la sequía hasta que reaparezca el arca de Noé), junto a señales que nos inviten -u obliguen- a unirnos como humanidad, a comprender vivencialmente que nuestro actuar le afecta a todos.

El 2012 será vertiginoso, especial e iniciático y nos invita a vivirlo con mucha conciencia, sujetando el ego y elevando el alma. Es un año para empezar de nuevo, ver lo negativo en nuestras dinámicas y cambiarlo ya, no mañana; así que no estaría mal hacer una lista de cosas transmutables con pasos a seguir. Muchos se iniciarán –por fin- en sendas espirituales (no religiosas, no es lo mismo) para mirar la vida con otros ojos, mientras que otros tantos se atreverán a transformar radicalmente su cotidianidad.

Este año quiere que cambiemos el switch, que entendamos de una vez que nada externo: trabajo, pareja, status, dinero, familia, casa, auto, títulos, tablet, etc., nos dará la felicidad, porque esa deseada chica no anda paseando afuera, está dentro nuestro y conquistarla tiene que ver con cómo enfrentamos los dolores, desafíos y regalos de la vida.

Por todo lo anterior, si tiene un pañuelo blanco, tómelo y dígale adiós al mundo cruel que hemos construido y habitado por miles de años. Hágalo con alegría, pues habernos acostumbrado a un sistema neurótico e inhumano, no es sinónimo de tener una buena vida y, de verdad, ahora sí podemos comenzar paso a paso a cambiarla, ya que este año tenemos el enorme poder y responsabilidad de salir del automatismo y saltar a una existencia más creativa, despierta, equilibrada, integral, conectada con nosotros mismos y con el Todo, en un planeta más respetado y amable.

¡Bienvenido el renacimiento 2012!