A dos años de haberse estrenado y a uno de haber sido galardonado como Auto del Año en Chile, Ford actualiza el sedán Fusion dándole una manito de gato en lo estético y agregando algunos elementos tecnológicos de vanguardia.
El exterior mantiene en gran parte las formas que ya se le conocían, pero en el frontal la máscara recibe un refuerzo visual con un biselado cromado que la rodea, en tanto las luces principales tienen una ligera muesca en su parte baja al mismo tiempo que incorporan tecnología LED. Los neblineros también pasan de ser redondos a una forma alargada horizontal.
Es en el interior donde se aprecian los mayores cambios, específicamente en el campo de los sistemas de seguridad activa a los que puede echar mano el conductor.
Hay un nuevo control crucero adaptativo con “Stop & Go” y asistente de pre-colisión, gracias al cual el vehículo es capaz de monitorear el tránsito existente para mantener una distancia segura con el vehículo que lo antecede y de esta forma desacelerar y frenar si es necesario para evitar accidentes.
El asistente de pre-colisión, alerta al conductor en caso de un choque inminente con el vehículo que lo antecede. Si el conductor no reacciona, los frenos realizarán una pre-carga y aumentarán la sensibilidad de asistencia de frenado para entregar una capacidad de respuesta mayor. En caso que el usuario no frene y la colisión sea inevitable, los frenos se activarán de manera automática.
También se ofrece ahora un sistema de detección de peatones capaz de detectar adultos y niños para prevenir atropellos. Si reconoce una potencial colisión y el conductor no frena, Ford Fusion activa los frenos de manera automática.
Además, se renovó el asistente de estacionamiento que Ford llama Park Assist. Desde su llegada a Chile, esta asistencia operaba para estacionamientos paralelos, pero a partir de ahora también puede hacerlo en espacios perpendiculares.
Los sistemas que ya tenía desde 2014 se mantienen, naturalmente: El sistema de alerta al conductor, el sistema de mantención de carril, el de alerta de tránsito cruzado y el monitor electrónico de punto ciego.
En seguridad pasiva todo sigue igual también: 8 airbags y cinturones de seguridad inflables en los asientos laterales traseros dependiendo de la versión.
En cuanto a la propulsión, hay sólo un ligero cambio. La variante con motor de 2 litros Ecoboost ahora es 5 caballos más potente, llegando a los 245 HP.
Ford señala que este pequeño aumento de poder no sólo no implica un aumento en el consumo, sino que al contrario, ahora es más económico, con un promedio en ciclo mixto de 10,2 km/l.
No se reportaron cambios en las especificaciones de la otra variante del Ford Fusion, con motor de 2,5 litros iVCT.
La caja de cambios sigue siendo automática de seis marchas, pero ahora en lugar de la tradicional palanca hay una perilla rotativa al estilo de los Jaguar que, según Ford, permite que la cabina se vea más amplia.
Aparte de eso, el Fusion de 2017 estrena un nuevo sistema de conectividad llamado Sync 3, que permite comandar smartphones conectados vía Bluetooth o a través del puerto USB; además, ahora es compatible con Android Auto y Apple Car Play.
Con el nuevo Sync 3 se puede manejar el teléfono; la temperatura del habitáculo; el sistema de navegación con mapas 3D e información de puntos de interés; el sistema de audio y las aplicaciones; ya sea por medio de simples comandos de voz o utilizando la pantalla táctil de 8”, que ahora viene con una interfaz más simple e intuitiva, con capacidad de arrastre, zoom y una velocidad de respuesta superior.
La actualización del Ford Fusion se ofrece a un precio referencial de $15.940.000 para la versión SE 2,5L y de $18.890.000 para la versión SE 2,0L EcoBoost.