El ícono más importante de la serie Batman, protagonizada por el recién fallecido Adam West, fue sin duda el espectacular Batimóvil, que millones de niños soñaron con manejar por allá a mediados de los años 60.
Durante tres temporadas el propio Adam West, enfundado en su traje del hombre murciélago, se encargó de manejar este fascinante auto en escenas tan maravillosas como desopilantes. Porque West en efecto manejó el auto en la mayor parte de las escenas donde apareció y públicamente se manifestó complacido por el aspecto del vehículo y por haber tenido la suerte de conducirlo.
Lo notable es que el famoso Batimóvil fue un auto casi real. Mejor dicho, existió un auto que se modificó para convertirlo en el modelo de Batman, pero entre el modelo original y el del Caballero de la Noche, las diferencias no eran tantas.
La base del Batimóvil era del Ford Futura, auto desarrollado en 1955 como modelo de exhibición y que, como muchos de entonces, estaba fuertemente influido por la cohetería que estaba de moda con la carrera espacial. Así, tenía aletas y un par de cabinas separadas de estilo aeronáutico-espacial.
Con un diseño tan exótico como el del Futura, George Barris, experto en transformación de autos para el cine y la TV, la tuvo fácil. Al que después fuera el creador del Auto Fantástico y de los SUV autónomos de Jurassic Park, le bastó ponerle una máscara con cara de vampiro, unos colores oscuros y una prominente tobera en la parte trasera para darle al Ford un carácter único e inolvidable.
Adam West señaló en su momento que disfrutó manejar el Batimóvil, aunque reconocidamente tenía unas dotes de manejabilidad y estabilidad bastante precarias. El actor jamás lo cuestionó, sin embargo. De hecho, hizo numerosas apariciones públicas a bordo del auto o de alguna de las cuatro réplicas que se hicieron para el programa.
Un autógrafo firmado por West para Barris en el propio Batimóvil hace varios años dice textualmente: “Gracias a George Barris por haber creado el auto más fantástico del mundo”.