SANTIAGO.- El último fin de semana de febrero marca el regreso de miles de automovilistas a sus lugares de origen después de las vacaciones y, sobre todo si se viajó muchos kilómetros, es necesario revisar varios puntos del vehículo para evitar desperfectos mecánicos.
Revisar los fluidos: Los niveles de los fluidos es uno de los puntos que deben pasar por una revisión por parte de los especialistas para poder tener el auto en óptimas condiciones durante el año. En este caso es importante chequear, por ejemplo, el nivel de aceite y cambiarlo de ser necesario. Además no hay que olvidar el líquido refrigerante y, de paso, el estado del radiador después de un viaje largo. Un líquido refrigerante que ha perdido sus cualidades o un desperfecto en el radiador podría generar un recalentamiento del motor del vehículo y costosos daños a la máquina.
Atención a los filtros: Los filtros del vehículo también deben ser revisados tras el viaje. El filtro de aire tiene como objetivo evitar el ingreso de impurezas en el flujo de aire que ingresa al motor, de ahí su importancia que esté en buen estado. Lo mismo pasa con el filtro de combustible que, tal como dice su nombre, tiene como misión impedir el paso de partículas y contaminantes que puedan interrumpir el normal flujo de bencina obstruyendo, por ejemplo, los inyectores del vehículo.
Cuidado con el desgaste y la presión de los neumáticos: Como muchos de los conductores regresan después de largos viajes en carreteras, tampoco se puede saltar el respectivo chequeo de neumáticos en cuanto al desgaste, balanceo, alineación y presión. Los dibujos de los neumáticos no pueden tener menos de 1,6 mm de profundidad que es el mínimo legal permitido.
Sistema de frenos que puede salvar vidas: Para cualquier tipo de viaje o paseo, y también para la vida diaria en la ciudad, se debe tener especial atención en el estado de los frenos, ya que las piezas se calientan al hacer fricción al frenar y eso sumado al calor del verano, puede hacer que estos se expongan a un sobrecalentamiento y fallen trayendo como consecuencia perdida del líquido de freno, entre otras. De ahí la importancia de revisar su estado al regreso de las vacaciones.
Todas las luces deben funcionar: Durante los largos trayectos en carreteras las luces de los vehículos también pueden resultar con fallas que muchas veces los conductores ni siquiera se percatan. Por eso es fundamental revisar el funcionamiento de las luces altas y bajas, además de señalizadores, luces de freno y de la patente, para evitar cualquier problema visual o incluso con Carabineros en una fiscalización.